sábado, 13 de diciembre de 2014

Asertividad



La Asertividad se define como: "la habilidad de expresar nuestros deseos de una manera amable, franca, abierta, directa y adecuada, logrando decir lo que queremos sin atentar contra los demás. Negociando con ellos su cumplimiento". Está en el tercer vértice de un triángulo en el que los otros dos son la pasividad y la agresividad. Situados en el vértice de la pasividad evitamos decir o pedir lo que queremos o nos gusta, en la agresividad lo hacemos de forma tan violenta que nos descalificamos nosotros mismos.

Emplear la asertividad es saber pedir, saber negarse, negociar y ser flexible para poder conseguir lo que se quiere, respetando los derechos del otro y expresando nuestros sentimientos de forma clara. La asertividad consiste también en hacer y recibir cumplidos, y en hacer y aceptar quejas.

La asertividad y la ansiedad

El elemento básico de la asertividad consiste en atreverse a mostrar nuestros deseos de forma amable, franca, etc., pero el punto fundamental consiste en lanzarse y atreverse. Lo que se expone en esta página puede ayudarnos a mostrar lo que sentimos y deseamos, porque sabemos que lo estamos haciendo de forma adecuada, que nadie se puede ofender. Esto nos ayudará a atrevernos a hacerlo.Pero cuando la ansiedad y el miedo son demasiado grandes hasta el punto de que nos dificultan o impiden expresar nuestros deseos, hemos de plantearnos una estrategia para superarla. En este enlace puedes encontrar las formas en las que la psicología cognitivo conductual ayuda a superar la ansiedad y en este otro enlace un curso para enfrentar y superar los límites que nos imponen nuestras ansiedades y nuestros miedos. En este curso entenderás la aparente paradoja de que la práctica de la asertividad conduce a una reducción notable de la ansiedad.

Con el afán de hacer asequibles a todo el mundo los medios terapéuticos más avanzados de los que se dispone, hemos publicado un pequeño libro (86 páginas): "Entiende y maneja tu ansiedad" en formato electrónico a un precio muy asequible (2,99€), también está en formato papel. Lo que contiene sobre la ansiedad y su manejo está aplicado en concreto a la ansiedad social. Emplea en la explicación del problema, de su solución y de lo que no son soluciones los medios más eficaces de comunicación: las metáforas, acompañadas, además, de magníficas ilustraciones que las hace más eficaces y fáciles de leer y recordar. Para el manejo de la ansiedad social propone ejercicios experienciales que concretan los expuestos en esta página. Tiene también interés para los profesionales porque muestra una forma de involucrar al paciente en el tratamiento y para entienda lo que le ocurre y conozca con detalle los ejercicios experienciales que le ayudarán a solucionarlo. Consulta el libro enhttp://www.gestopsicologia.com/entiende_maneja_ansiedad.html.

Reglas básicas para ejercer la asertividad

Existen técnicas y reglas que aprendidas y aplicadas nos permiten ejercer la asertividad de forma eficiente. Para ello hay que prepararse a negociar y hay que cumplir las reglas que implican una negociación eficiente. Existen también técnicas simples como el banco de niebla o asentir en principio, y el disco rayado, que nos facilitan su ejercicio concreto y cotidiano.

Para poder ejercitar la asertividad tenemos que tener capacidad de negociación. En la negociación se intenta conseguir lo que se quiere con el beneplácito del otro, que lógicamente también va a tener algunos beneficios.
La realización de una negociación comprende varias fases. La primera, es la de preparación. En ella tenemos que pensar la estrategia que tenemos que seguir en el encuentro con el otro en el que se va a plantear los problemas y se va a hacer la negociación propiamente dicha.

Fase de preparación

Para poder conseguir cualquier cosa tenemos que saber como hacerlo y para ello hay que prepararse. Ir a un encuentro sin tener una mínima guía de comportamiento, cuando, además, no somos negociadores experimentados, nos expone a no lograr para nada los objetivos que perseguimos. Por tanto hay que preparar lo que se va a decir y a hacer en la negociación cara a cara con el otro. 
Dentro de la preparación habría que distinguir dos subfases. La primera de preparación personal para evitar caer en la pasividad o en la agresividad y la segunda de preparación del diálogo que vamos a plantear al otro.

Fase de preparación personal

Se trata de una fase previa, necesaria para tener muy claros los objetivos que perseguimos en el encuentro. Es lo que nos motiva  a la negociación. Cuando negociamos tenemos que tener la vista puesta en nuestros objetivos. Hay algunas cosas que nos pueden distraer de ellos y hacernos fracasar. Por ejemplo, nuestra emoción. No podemos confundir la emoción con el objetivo. Nos gustaría quedar bien, pero normalmente ese no es el objetivo. Nos gustaría machacar al otro, pero así no lograremos lo que realmente queremos. Nos gustaría que el otro reconociese que tenemos razón y que él estaba equivocado, pero nos tenemos que preguntar si ese es nuestro objetivo o si así solamente conseguiremos una recompensa de tipo emocional, mientras que nuestro objetivo se pierde. No hay que olvidar la máxima: “lo que cuenta son los hechos y no las palabras”. Si nos explayamos y nos descargamos emocionalmente puede que hayamos conseguido una recompensa a corto plazo, pero la pregunta que tenemos que hacernos es si hemos conseguido nuestros objetivos. 
Hay que huir de juicios de intenciones. Si juzgamos las intenciones de la otra persona y nos basamos en ellas para plantear la relación con el otro, corremos el riesgo de contestar y reaccionar a las intenciones que pensamos que tiene el otro y perdemos de vista nuestros objetivos. Así podemos llegar a ser agresivos o a ser pasivos. Si nos han hecho algo que nos ha dolido y pensamos que lo ha hecho con buenas intenciones, podemos estar tentados de dejarlo pasar y no decir nada. Si juzgamos que lo ha hecho con mala intención, vamos a atacar su “maldad” y no los hechos y seremos agresivos. En una negociación no se trata de agredir y someter al otro, aunque lo veamos como un rival. Hay que darle una salida, más o menos airosa porque si no se revolverá contra nosotros. Querer que nos reconozca lo equivocado que está y se someta completamente a nuestros deseos puede ser un objetivo emocional, que compense la humillación que hemos sentido, pero ¿es realmente nuestro objetivo? Sí tenemos que intentar entender que cosas son las pueden motivar al otro para hacer lo que nosotros queremos que haga.
Tenemos que pensar en como crear la oportunidad de la negociación. Si es algo pendiente desde hace mucho tiempo y que queremos abordar, hay que buscar al otro y plantear un tiempo y un espacio en el que se pueda dar la negociación. Es lo primero que tenemos que conseguir del otro. Sin ellos no se consigue, no es posible hacer la negociación. En muchas ocasiones no hay que buscar la oportunidad, es la propia situación en la que se genera el problema. Pero en ella nos puede ocurrir que cuando el otro se va es cuando se nos ocurre aquello teníamos que haber dicho. Recuerda: Siempre hay una segunda oportunidad aunque haya que crearla. Crear la oportunidad es buscar al otro y plantear, aunque sea por enésima vez, el tema que nos ocupa. Cualquier frase introductoria como decirle, “de lo que hablamos ayer me gustaría comentarte algo” o frases parecidas para iniciar la conversación son ayudas inestimables para crear la oportunidad.
Con los objetivos claros podemos controlar nuestra agresividad y motivarnos para dejar de ser pasivos, con la oportunidad creada y el entendimiento de lo que el otro espera podemos preparar el momento concreto de la negociación.

Preparación del diálogo

Sin perder de vista que lo importante es lo que hagamos y lo que decimos solamente puede ser una guía para que el otro sepa cuales van a ser nuestros siguientes pasos, tenemos que preparar aquello que vamos a decirle. El diálogo que tengamos con él tiene que cumplir los siguientes requisitos para ser un diálogo asertivo:

1.-Describir los hechos concretos. Se trata de poner una base firme a la negociación, en la que no pueda haber discusión. Cuando describimos hechos que han ocurrido el otro no puede negarlos y así podemos partir de ellos para discutir y hacer los planteamientos precisos. En este punto es donde más tenemos que evitar hacer los juicios de intenciones. No se trata de decir “eres un vago” sino decir, “vengo observando que te levantas desde hace ya varias semanas a la hora de comer”. Diremos me has dicho 10 veces “no sirves para nada” en lugar de “me quieres denigrar y hundir” (juicio de intenciones.)

2.-Manifestar nuestros sentimientos y pensamientos. Es decir comunicar de forma contundente y clara como nos hace sentir aquello que ha ocurrido y que juicio moral o de pensamiento nos despierta. Es el momento de decir “estoy hasta las narices de esta situación y no la soporto más”, o “me he sentido humillado y denigrado”. Hay que recordar que no se trata de que el otro lo encuentre justificado o no. Le puede parecer desproporcionado, o injusto, o... pero es lo que nosotros sentimos y tenemos derecho a hacerlo así, no aceptaremos ninguna descalificación, defenderemos nuestro derecho a sentirnos tal y como le decimos. Le estamos informando, no le pedimos que nos entienda o nos comprenda, por eso no puede descalificarnos ni aceptaremos críticas a nuestros sentimientos, emplearemos la técnica del banco de niebla combinado con el disco rayado (ver más abajo.)

3.-Pedir de forma concreta y operativa lo que queremos que haga. No se trata de hablar de forma general o genérica, “quiero que seas más educado”, “quiero que me respetes” “quiero que no seas vago”; sino que hay que ser concreto y operativo: “quiero que quites los pies de mi mesa”, “quiero que cuando hablo me mires a los ojos y contestes a lo que te pregunto”, “quiero que estudies tres horas diarias”. Son conductas concretas que el otro puede entender y hacer.

4.-Especificar las consecuencias. Es decir, aquello que va a ocurrir cuando haga lo que se le ha pedido. Se le podría plantear también las consecuencias que tendrá para él no hacerlo, pero es preferible especificar lo que va a obtener de forma positiva. De otra manera lo que planteamos es un castigo y los castigos son mucho menos efectivos que los premios o refuerzos. Muchas veces se trata solamente de una forma de presentación, hay que tener en cuenta que frecuentemente algo que puede ser planteado como un castigo, si no lo hace, se puede ver  como algo positivo si lo hace. “Si no lo haces tendrás un castigo” se puede convertir en “Si lo haces evitarás que haga lo que no quiero hacer que es lo que supone un castigo para ti, que es algo que, por supuesto, yo tengo que hacer para ser consecuente con mis objetivos y los sentimientos que ya he expresado”.

Ensayo

Lo que se ha preparado, preferentemente por escrito, se tiene que ensayar hasta aprendérselo de memoria. Cuando vamos a un examen nos ponemos nerviosos y se nos olvidan muchas cosas, puede pasarnos lo mismo en este caso y por eso hay que aprendérselo de memoria. 
Si la situación nos causa alguna ansiedad, es una razón más para el ensayo. Cuando nos imaginamos la situación de la negociación nos estaremos exponiendo a ella en la imaginación y al menos cuando pensemos en hablar con el otro no nos pondremos nerviosos y comenzaremos nuestra negociación en mejor posición anímica. Si nos ponemos nerviosos podemos acogernos al diálogo que hemos preparado en la seguridad de que vamos a expresar nuestros deseos de forma completa. Cuando la ansiedad es demasiado grande hasta el punto de que nos impide expresar nuestros deseos, hemos de plantearnos una estrategia para superarla. En este enlace puedes encontrar las formas en las que la psicología cognitivo conductual ayuda a superar la ansiedad y en este otro enlace un curso para enfrentar y superar los límites que nos imponen nuestras ansiedades y nuestros miedos y en forma de autoayuda en "Entiende y maneja tu ansiedad"

Ejecución

En la fase de ejecución hay que tener en cuenta algunas técnicas básicas que nos permiten llevar a cabo lo que hemos preparado. No hay que olvidar nunca que nuestros objetivos están plasmados en el diálogo que hemos preparado y que nuestra meta inmediata es decirlo. No se trata de contestar a todas las digresiones que nos hagan, no es necesario ser rápido y agudo para poder responder de forma inmediata a todo lo que nos digan. Se trata de emplear la técnica del banco de niebla, que también se llama aceptar en principio, seguida de la del disco rayado.
La forma de hacerlo es diciendo que “puede que lleves razón; pero...” (banco de niebla) lo que yo quiero decir es que.. “  y se sigue con el diálogo en el punto en el que fuimos interrumpidos o repitiéndolo desde el principio (disco rayado.) Puede parecer muy limitado y que vamos a hacer el ridículo, pero es sorprendente lo efectivo y natural que resulta. Si saca otros temas, también importantes, no perdamos de vista nuestro objetivo, tenemos que acabar con lo que ha motivado la negociación para poder seguir más tarde con lo que acaba de plantear: en ningún momento hay que perder de vista nuestro objetivo, plasmado en el diálogo preparado.

Ejemplos

 Situación 1:
Un amigo acaba llega a cenar, pero una hora más tarde de lo que había dicho. No ha llamado para avisar que se retrasaría. Estás irritado por la tardanza. Tienes estas alternativas: 
1.      CONDUCTA PASIVA. Saludarle como si tal cosa y decirle “Entra la cena está en la mesa”. 
2.   CONDUCTA ASERTIVA. He estado esperando durante una hora sin saber lo que pasaba (hechos). Me has puesto nervioso e irritado (sentimientos), si otra vez te retrasas avísame (conducta concreta) harás la espera más agradable (consecuencias). 
3.      CONDUCTA AGRESIVA. Me has puesto muy nervioso llegando tarde. Es la última vez que te invito.

Situación 2:
Un compañero de trabajo te da constantemente su trabajo para que lo hagas. Decides terminar con esta situación. Puedes crear la situación preguntándole como lleva su trabajo o esperar a que el la cree cuando te pida otra vez a le ayudes haciéndole algo.  Las alternativas podrían ser: 
1.      CONDUCTA PASIVA. Estoy bastante ocupado. Pero si no consigues hacerlo, te puedo ayudar. 
2.     CONDUCTA AGRESIVA. Olvídalo. Casi no queda tiempo para hacerlo. Me tratas como a un esclavo. Eres un desconsiderado. 
3.     CONDUCTA ASERTIVA. Muy frecuentemente me pides que te eche una mano en el trabajo que te asignan, porque no te da tiempo o porque no sabes hacerlo (hechos). Estoy cansado de hacer, además de mi trabajo, el tuyo (sentimientos), así que intenta hacerlo tú mismo (conductas), seguro que así te costará menos la próxima vez (consecuencias).

Situación 3
Vas a un restaurante a cenar. Cuando el camarero trae lo que has pedido, te das cuenta de que la copa está sucia, con marcas de pintura de labios de otra persona. Se trata de llevarse bien con el camarero para que nos sirva bien, pero eso no es un buen servicio, podrías:
1.     CONDUCTA PASIVA. No decir nada y usar la copa sucia aunque a disgusto.
2.     CONDUCTA AGRESIVA. Armar un gran escándalo en el local y decir al camarero que como el servicio es asqueroso nunca volverás a ir a ese establecimiento.
3.    CONDUCTA ASERTIVA. Llamar al camarero y, mirándole a la cara y sonriendo, pedirle que por favor le cambie la copa.


Fuente: “Terapia de Aceptación y Compromiso” Editorial Ariel Psicología. Dr. J.A. García Higuera
Con modificaciones mías hechas en mayo 2013

martes, 18 de noviembre de 2014

Si no podem canviar les coses... podem canviar la nostra actitud? no sempre...



Quan un no pot canviar els esdeveniments, ha de canviar la seva actitud.  Fins aquí és correcte.  Per exemple:  el tren arriba tard i un no es pot fer mala sang, ni pot cabrejar-se per que no pot canviar, ni influir per que el tren arribi a l’hora.  De la mateixa manera si plou i et mulles no pots cagar-te en la mare que va parir al núvol, per tant la actitud ha de ser pacient i tirar-te a l’esquena de la millor manera possible el trastorn que et pugui produir el arribar més tard del previst allà on sigui o el mullar-te.   Estem d’acord. 

Però si filem més prim veurem que els exemples pertanyen a dos causes externes de diferent qualitat.  Una és d'organització humana, l’altre és d’atzar natural.  Contra els fets de la natura, sigui pluja o terratrèmol, no puc fer res més que patir-los amb la millor disposició d'ànim de la que sigui capaç.  Contra els atzar que depenen de la organització social si que puc fer una cosa més, a banda de patir-ho i portar-ho dignament, sense cabreig, i és que puc esperar una reparació pels inconvenients o molèsties causades.  I per rebre una compensació hauré d’instar una queixa.  No es pot ser passiu ni agressiu en la demanda d’una queixa sinó que s’ha de ser assertiu.  La assertivitat és la habilitat per expressar els nostres desitjos d’una manera clara, directa y adequada, amb amabilitat i respecte per l’altre, obtenint el que desitgem sense atentar contra els demés o negociant amb ells el seu compliment.  

Però que passa quan els esdeveniments depenen només de la voluntat d’una tercera persona i per tant si que poden canviar.     Dependrà de les circumstancies que envolten a la relació que tinguis amb aquesta persona.  Bàsicament si és un estrany o no.  Si és un estrany s’ha de avaluar molt bé si val la pena establir un mecanisme de queixa.  Si el dany sofert és important haurem de fer-ho de la millor manera possible.  Si el dany no és considerable podem tractar l’incident com un ‘esdeveniment de la natura’ i adoptar una actitud resignada.  Dependrà també de la assiduïtat del incident.  Per exemple pugem al tren i un individuu ens fa una empenta per entrar primer o ens trepitja, en el cas de que no es disculpi el podem recriminar dient-li «mira per on vas si us plau», i esperar una disculpa.  Si es disculpa, o si d’entrada ens diu:  «perdó, ho sento, no m’he donat compte», llavors el disculpem i no li tenim en compte.  Però si el mateix individuu reitera moltes vegades la mateixa conducta —perquè viatja cada dia en el mateix tren que tu—, encara que sigui un desconegut, tindrem un problema que s’ha de resoldre.  Podem adoptar tres conductes: la passiva, tractar de no coincidir mai més al mateix vagó de tren i esta pendent de la seva presencia per esquivar-lo; ser agressius i la propera vegada fotre-li un joc d'hòsties per que s’assabenti de que no pot anar pel mon ignorant els altres; i podem tenir una conducta assertiva per establir una queixa: això significa que primer li exposarem el fet repetitiu, desprès li direm que això ens molesta bastant, seguidament li explicarem que faria be en mirar amb més cura al seu voltant per que si tothom fes com ell això seria una guerra continua i finalment li farem veure que si fa això tots viurem més bé.  Haurem seguit un model que passa per quatre fases: descriure els fets, descriure els sentiment que genera, aconsellar una conducta diferent i descriure els beneficis de canviar de conducta.   

Depèn molt del tarannà de cada qual que s’adopti un o altre conducta.  En general la educació fa que la resposta agressiva no es doni d’entrada, pot influir en fer-ho si prèviament estem molt estresats o si tenim la paciència al limit per altres esdeveniments similars o algun conflicte personal que fa tenir les respostes molt a flor de pell.   La conducta passiva no és més bona, encara que sembli educada, doncs significa eludir la oportunitat d’ajudar a millorar la conducta d’un altre ser humà que a lo millor ho necessita.  És per tant una resposta egoista i que no te en compte que, si ho intentem i posem els sentits en fer-ho, podem ensenyar un cert comportament al que no sap fer-ho.  En definitiva si volem que la nostre resposta de queixa sigui útil no podem perdre la raó sent agressius ni hem de ser passius, o sigui covards i egoistes.  Hem de ser assertius, o sigui valents i francs. 

Peró que passa quan això ho traslladem a un ser humà conegut, quotidià, sigui un company de feina, un amic, un fill, o la nostre parella.   Doncs que en aquest cas entren en joc també els sentiments i la valoració que fem de la resposta possible de queixa queda molt matisada per això.  És dir, ja no modera el tipus de resposta la educació sinó el lligam que mantenim amb l’altre.  Si estem tractant un episodi aïllat, un fet inusual o únic, no cal dir que estarem molt més disposats a no tenir en compte l’inconvenient que patim.  Peró quan es tracten de qüestions que es repeteixen sempre amb el mateix transfons de conducta involuntària, haurem de fer alguna cosa.  És evident que si la conducta és voluntària llavors el problema és molt més gran i s’escapa d’aquesta reflexió.

Quan una conducta involuntària es repeteix seguint un patró similar, pot afectar a diferents àmbits de la convivència.  Sovint és això el que tenyeix la convivència de ‘mal rotllo‘ i dona tensions que son acumulables.  

Malgrat que l’amor, l'estimació, l’afecte, siguin presents, no sempre és fàcil mantenir una actitud correcta quan la repetició de fets s’acumula, i és natural que a vegades les espurnes saltin perjudicant la convivència.  

Descartem la agressivitat, per que és incompatible amb les relacions familiars o d’amistat, si de cas hem d’admetre que poden haver expressions contingudes d’aquesta agressivitat latent que poden posseir-nos en moments concrets.  És més una qüestió de queixa expressada amb malestar, traduïda en mirades o comentaris negatius cap a l’altre que considerem responsable del fet, el que hem de valorar aquí.   La passivitat davant de fets repetitius no mostra més que submissió, covardia i egocentrisme. La passivitat és més freqüent que la agressivitat entre els membres de família, relacions d’amistat o de feina.  També és més fàcil i típica –com a resposta– del qui no vol afrontar els problemes de forma franca o de cara, i segurament és un reflex de la mandra natural que tenyeix freqüentment la conducta humana.  Diguem que des del punt de vista de la mecanicitat de la vida, és la forma habitual de conduir-se.  Si el nivell de autoconsciència és més alt, encara que sigui més costós, es fa possible respondre a la queixa de la repetició amb assertivitat.   

Però... 

¿Que passa quan l’intent de ser assertiu topa repetidament amb la deixadesa de l’altre que no pren en consideració els fets i no mostra cap interès en reconduir els seus hàbits, o si més no deixa passar les oportunitats per modificar la conducta?  

¿Que passa quan l’intent de ser assertiu topa amb la falta de comprensió psicològica de quines son les arrels dels problemes o les minimitza per tal de no tenir la feinada de entrar a investigar què o quines coses hauria de modificar?  O sigui, en resum ¿que passa quan l’altre pren la postura de acceptar les seves limitacions i conformar-se en ser com és?  

Doncs que estem davant d’un ‘síndrome’ de sol (si és home) o de princesa (si és dona).  El ‘síndrome’ de sol o princesa el tenen éssers humans que tenen un alt concepte de si mateixos, son persones força equilibrades que no acostumen a equivocar-se, però quan ho fan no ho reconeixen fàcilment, sovint es refermen buscant que se'ls hi reconegui que tenen raó.  Però el tret característic és que tot va bé si tot gira bé al seu voltant.   És preocupen dels altres només en tant compleixen amb el paper que tenen assignat.   No es posen a la pell dels altres, per que no tenen practica.  I si alguna cosa no va bé, sovint (o sempre) és per que als altres no han fet be el seu paper de satèl·lits (sol) o servents (princesa).  És evident que això no és un comportament conscient, ningú amb dos dits d’enteniment acceptaria que això és una conducta correcta.  En realitat ells no poden veure des de dintre els efectes de la seva conducta.  Entre altres coses per que no se la qüestionen reflexionant de debó sobre el seu procedir o les conseqüències d’aquest.  La identificació amb el paper de sol o princesa els fa cecs a les conseqüències negatives que això pot comportar respecte al seus propers i, depenent de la seva intel·ligència natural, disfressen més o menys bé el seu paper de qualitats organitzatives, de lideratge, de interès per la vida social, de ocupació continua en tasques externes de les que han de dependre dels altres per que la seva dispersió no contempla el fer les coses amb pausa i mesura, segons les pròpies possibilitats,  sinó de fer quantes més coses millor encara que sigui utilitzant als altres per arribar allà on no poden arribar amb les seves energies. A la fi els altres estan per això, per que ells pugin fer tot el que han de fer.   El síndrome de sol o princesa és en definitiva una actitud vital. Que se’ls noti mes o menys que van a la seva bola es qüestió d’habilitat e intel·ligència emocional.  

 ¿Com es pot conviure amb un sol o princesa? doncs només hi ha un camí, acceptar que seràs un satèl·lit o servent de les seves decisions o preferències, i de la seva organització de la vida.   No serveix de gaire el fer reflexionar a un sol o princesa per que en principi no hi ha motiu per canviar res. Tot esta bé en ells, son els altres els que tenen conflictes.  I els conflictes sempre acaben tenint una explicació satisfactòria per ells, casi sempre acaben tenint raó. Quan no és per que els altres «exageren les qüestions i les coses son més simples del que el altre vol fer veure», o és per que els altres «no m’estimen prou», o és per que els altres «estan equivocats en les seves percepcions» o és que els altres no saben que «això pot passar i no és culpa meva», o és que els altres no han tingut en compte que «es que jo soc així», o, o….

Per definició el sol o princesa casi mai insta de motu propi una reflexió sobre la seva conducta o la dels altres.  Sobre la seva per que no troben motius per fer-ho, sobre la dels altres per que sovint estan massa ocupats, i si se’n preocupen de la dels altres és superficialment i en tant els hi afecta personalment, amb el que acaba sent sempre una qüestió practica de modificació externa que no va més enllà ni contempla una averigüació  de la cadena de fets que permet la repetició del mateix fet.  Viuen en el present per que és menys costos, energèticament parlant, que tornar la vista enrere per saber si alguna cosa que varen fer era millorable.  Sempre hi ha una fugida cap endavant permanent i un dia tapa a l’altre.  En general no tenen temps per ‘menjades de coco’, sempre estan tant ocupats fent coses, que no saben que existeix un temps per si mateix, per reflexionar sobre la pròpia vida i la vida dels altres.  Son éssers humans amb molta mes vida exterior que vida interior.  Brillants conversadors i molt sociables, això si.  Però els poses en un compromís quan els fas pensar en si mateixos.  El seu pensament es mes sensual y practic que no analític y abstracte.  

Quan el sol o princesa son petits poden haver tingut una mare princesa o un pare sol, això vol dir que han estat tractats com a «solet meu» o «princesa meva», en realitat tal com desitgen tots els nens… però en aquest cas el seu desig s’ha fet real i no han patit la contrarietat de la seva voluntat més que de forma superficial, en general sempre han acabat fent el que volien per que els han permès tant els propers com l’entorn, i han anat generant un concepte vital de que a la vida venim per fer que els altres siguin útils al meu propòsit, a la meva voluntat i al meu desig.   En realitat un reflex del que la mare princesa o el pare sol ha projectat inconscient a sobre d’ells.   

La meva mare podia ser un bon exemple de princesa, de fet era la única nena de tres fills, va ser la petita i tenia una mare, la meva avia, que era princesa. El meu avi matern era un super bon jan que sempre va complaure a la meva avia i que sempre va viure a les seves ordres.  Però la meva mare va patir l’ensurt de la guerra civil quan era adolescent i això va impedir que el síndrome de princesa anés a mes. Era molt atractiva i segura de si mateixa.  Però el que la va fer canviar definitivament crec que va ser l’ensorrament de la industria tèxtil del meu pare quan jo tenia 10 anys, i veure's passant economies quan era acostumada a una vida regalada amb tres minyones a casa seva.  Aquest sotrac important a la seva vida, tenia 35 anys, va modelar de forma important el seu pensament que va refugiar-se en la religió, no a la religió externa, de la que per suposat era practicant, sinó a un concepte mes profund de la vida espiritual a on va iniciar una nova manera de veure la vida, mes profunda i madura.  Quan jo ja tenia 15 anys tenia converses molt enriquidores amb ella, i d’ella vaig aprendre a tenir vida interior i a aprofundir en els fets amb una comprensió psicològica mes que sensual de la vida.  Ella va triar el camí de la religió autentica per transformar-se i construir el seu ésser.  Per contrast d’ella, quan jo era adolescent vaig mantenir una gran lluita interna entre la religió i la filosofia com a instruments de perfecció humana.   De resultes d’aquesta crisi interna vaig recorre camins tan oposats com l’Opus Dei o el Zen, i vaig llegir tots els filòsofs importants abans de complir el 20 anys.   Els atzars de la vida em varen conduir a un camí de perfecció del ésser intern en el que vaig invertir 18 anys de la meva vida.   

Està clar que el síndrome de sol o princesa es pot patir en molts graus diferents, no es una qüestió de tot o res.  Hi ha moltes subclasses de sol o princesa, també hi ha sols o princeses frustrats pels atzars de la vida.  Finalment estan els sols o princeses que degut als atzars, en aquest cas positius, de la vida, han adquirit un capacitat reflexiva i han descobert el seu mon interior amb el desig que hi emana de millorar la seva existència i no conformar-se amb la acceptació de la vida tal com es.  

No podem fer un judici de valor sobre els comportaments dels altres per que no posseïm el coneixement necessari de la seva vida, ni dels condicionants que han determinat la seva manera de ser i de estar al mon. Només en podem fer una descripció dels fets.  Peró no podem deixar passar les oportunitats de fer veure al nostre entorn que no ens podem refugiar en el que ens ha determinat com som, sinó que hem de saber valorar que si bé no podem canviar el passat quer ens va modelar, si que som lliures per decidir sobre el futur.  La autentica felicitat no ens la dona la vida sinó que ens la construïm nosaltres cada dia. 

Els nostres fills seran en gran part el que nosaltres som.  Si els hem ensenyat l’inici d’un camí de reflexió, segurament el seu moment arribarà en la forma i atzar que sigui, però sabran reconèixer la seva oportunitat.  Si només hem viscut a la vida externa segurament no sentiran mai la necessitat d'aprofundir en els conceptes abstractes que donen l’impuls a la construcció del ésser.  A la  possible remodelació (mecànica) del futur. 


sábado, 18 de octubre de 2014

Respuesta a un españolista... en 2004



Veo que mi análisis político se refrenda en el panfleto que me mandas.  Aunque lo vea desde una óptica diametralmente opuesta, efectivamente estoy de acuerdo en que la única solución inteligente para sortear el problema nacionalismo-antinacionalismo era la que seguramente se pactó entre el PSOE y el PSC de los 70.  Demonizar el nacionalismo es tan malo como ignorarlo. El sentido nacionalista, te lo dije y lo repito, es una realidad que existe y con la que hay que vivir. Infravalorarlo es ignorar que un pueblo como el catalán, con su cultura propia, su lengua  y sus símbolos, solo puede vivir integrado en una comunidad más amplia si se hace desde el mutuo respeto.  Desde 1711 o desde antes quizás, la fuerza de los hechos y de las armas ha estado bloqueando las aspiraciones de una parte nada desdeñable de los habitantes de este territorio.  Las políticas de integración que durante más de doscientos años se han practicado desde España hacia Cataluña siempre han sido con el objeto de castellanizar o españolizar la realidad cultural, social y lingüística de Cataluña. Empeño que es propio de la historia y de los pueblos que conquistan y por otro lado destino de los pueblos que son conquistados. Pero eso no quita que exista en mayor o menor cuantía una resistencia a ser asimilados. Repito: ignorar estos hechos o principios, voluntariamente, es no querer aceptar algo real y palpable.  Hubo un periodo de renacimiento del epifenómeno identitario catalán desde finales del siglo XIX que llevó, ya en la Republica, hasta los hechos de la declaración del Estado Catalán en el treintaypico.  Después de la guerra civil, el franquismo político comprendió que solo con una represión cultural y social (que conllevara una re-castellanización de lo que durante la Renaixença se había recuperado al dominio castellano), era posible cohesionar a Cataluña con España.  Y estuvo a punto de lograrlo. Al Franquismo solo le faltaron un par de generaciones más y lo hubiera logrado.  Yo mismo soy un buen ejemplo de ello.  Siendo mi origen catalán por los cuatro costados, desde más de 20 generaciones,  soy castellanoparlante por lengua materna y mi cultura es mucho más castellana que catalana.  No leo literatura catalana, no veo cine en catalán si lo puedo evitar, pienso en castellano y solo escribo en catalán cuando no me queda más remedio.  Como yo un gran numero de catalanes.  Casi todos son mayores de 45 años.  Es la edad en la que nos pilló la gran labor de recastellanización que emprendió Franco tras la guerra civil.  Creo que desde su punto de vista hizo lo mejor que pudo su faena.  Pero la  historia tiene saltos.  Después de la muerte de Franco era necesario contemplar un escenario con nacionalismo resurgido.  Quedaba mucha gente represaliada a la que no se había castellanizado (como a mi) y estos estaban dispuestos a dar la batalla.  Se optó por una transición pacifica, sin rupturas ni traumas, vale.  Los que calcularon la deriva histórica hicieron bien sus deberes, comprendieron que solo se podría dar la vuelta al tema del nacionalismo al paso de al menos tres generaciones.  Ahora estamos de lleno en la segunda generación tras la muerte del dictador.  Probablemente ahora se den cuenta muchos de lo que esta pasando, de lo que ha pasado en sus narices durante estos años.  No hay posibilidad real de retorno.  Los votantes de izquierda también pueden ser catalanes y nacionalistas. Esto es lo que el articulista no quiere ver ni reconocer.  Es falso, interesadamente falso, decir que ERC es textualmente “un partido reaccionario y xenófobo de derechas con estética de izquierdas”.  Es cierto que hay una bolsa importante de votantes del PSOE que son emigrantes o hijos de emigrantes en primera generación, pero no van en aumento, biológicamente todos son mayores ya y van a menos, la tercera generación de hijos de emigrantes, los que ahora tienen más de 25 años, ya no votan PSOE. No, y esos, que todavía hablan en castellano con sus padres, con sus hijos, -mal nos pese a algunos entre los que me cuento-, hablan en catalán y votarán de izquierda, si, pero cada vez más de izquierda nacional catalana. No todos claro, pero seguro que muchos ya no votaran una izquierda socialista antinacionalista. Tampoco votaran, todavía, una izquierda independentista, eso quedara para la tercera generación, para los que ahora están en primaria… (si es que seguimos haciendo, entre unos y otros, el juego a las tensiones, si seguimos alimentando la radicalización). Porque? Es obvio que 23 años de gobierno pujolista ha conseguido casi lo mismo que 40 años de franquismo pero al reves.  Lo ves, me dirá algún miope (sin faltar que yo también lo soy), como todos son iguales.  Naturalmente ¿es que lo dudabas?  Cada cual ha de hacer su papel y nosotros el nuestro.   

Pero entonces qué es lo que postulo? 
En primer lugar ser realista con lo que hay y no creer que el socialismo antinacionalista tiene ninguna opción de éxito en Cataluña. Tendrá sus votantes si, pero irán a la baja progresivamente a medida que los hijos de la clase obrera emigrante se inserten en el tejido social catalán por biología y mestizaje. O sea en una generación más, o dos como mucho.  
En segundo lugar abrir los ojos al federalismo como doctrina. Creo que hay un gran reto detrás de esta idea y que ojala se pudiera explicar más y mejor a la izquierda, que no tiene por que estar reñido socialismo y nacionalismo (catalanismo) siempre que este no sea radical, independentista e insolidario.   
En tercer lugar denunciar que Carod intenta acelerar el proceso de desunión de PSOE y PSC para recoger en su provecho los votos más nacionalistas que rezumen del PSC. Y en esa denuncia advertir al PSOE que no se deje radicalizar por las facciones antinacionalistas (que en él pugnan por tener protagonismo) por que el remedio que pretenden aplicar es peor que la enfermedad que creen padecer.  En realidad su única opción es aceptar que la realidad de ESPAÑA es plurinacional y por tanto se ha de trabajar bajo la óptica del respeto a esta idea.  Pero este es –parodiando a tu articulista- un trabajo para gente con buena visión de futuro, no para empecinados en repetir los errores del pasado. 



viernes, 12 de septiembre de 2014

El Compromiso de Caspe




[El fin de la dinastía de los condes de Barcelona, en la corona de Aragón]

Después de 500 años de sucesivos relevos al frente del Principado de Catalunya y posteriormente de la Corona de Aragon, la dinastía medieval de los Condes de Barcelona toca a su fin, al morir el ultimo de sus reyes sin descendencia legitima viva.  

El 31 de mayo de 1410 moría Marti el Humano en Barcelona.  Antes habían muerto ya sus cuatro hijos legítimos:  Marti el Joven, Jaume, Joan i Margarida. 

Solo quedaba vivo un nieto bastardo de Marti el Humano,  Frederic de Luna, también conocido como Frederic de Aragon y Sicilia, duque de Arjona, conde de Luna i señor de Sogorb.  Nació en Sicilia en 1402?, hijo de Marti el Joven y una amante italiana: Tarsia Rizzari de Catania.   

Pero veamos como fueron las cosas.

El heredero natural de Marti el Humano, era su hijo mayor Marti el Jove quién se casó con Maria de Sicilia, con la que tuvo un hijo que murió a los 6 años, la madre sobrevivió al hijo tan solo dos años.  Marti el Jove o Marti I de Sicilia al año siguiente se volvió a casar con Blanca I de Navarra con la que tuvo un nuevo hijo en 1403: el infante Marti de Aragon, que también moriría a los 4 años...  Así pues el único descendiente vivo que le quedaba era su bastardo, nacido probablemente entre la muerte de la primera esposa y su siguiente boda...  Tanto el padre como el abuelo tramaron la legitimación del bastardo para poderle presentar como legitimo heredero tanto al reino de Sicilia como a la corona de Aragon (Catalunya, Valencia y Mallorca).   El padre le concedió los títulos nobiliarios de conde de Luna y señor de Sogorb, el paso siguiente era habilitarlo públicamente para ocupar el trono de Sicilia, cosa que consiguió.  Pero tres meses más tarde de esta declaración murió, aparentemente de enfermedad, Marti I de Sicilia, en la ciudad de Caller,  en Cerdenya, en cuya catedral se conserva su ornamentado mausoleo.  Se cree que pudo morir envenenado al tratar de curarle las fiebre de la malaria.  Hacia escasamente un mes que Marti I de Sicilia había reconquistado también Cerdeña para la corona de Aragon al vencer en junio de 1409 a los sardos apoyados por los genoveses, en la batalla de Sanluri. 

El abuelo del único heredero vivo, aunque todavía no legitimado en la Corona de Aragón, se puso a tramitar su legitimación y se apoyó en el papa cismático Benet XIII, pero no tuvo tiempo de hacerlo pues murió un día antes de reunirse con el Papa en Barcelona.  Esto es lo que hasta el 2009 se creía.  Desde hace 7 años nuevos documentos del Archivo de la Corona de Aragon cuestionan este extremo, más adelante me extenderé para explicarlo. 

Así pues el 31 de mayo 1410, muere el ultimo Rey de Aragon de la dinastía de los Condes de Barcelona sin completar el proceso de legitimar a su nieto bastardo.  Se dice que pudo morir envenenado de la mano de la madre y de la esposa de Jaume d’Urgell, uno de los candidatos a sucederle.    Comenzaba un periodo de algo mas de 2 años que se conoce como El Interregno de la Corona de Aragón (1410-1412)

A la muerte del monarca, sin testamento sucesorio a favor de un pretendiente concreto, y sin herederos legales vivos, se abrió un debate para la sucesión que duró dos años.  El peso fundamental de las negociaciones lo llevaron los dominicos valencianos, a la cabeza de la cual se nombró a Vicente Ferrer uno de los grandes predicadores de la cristiandad por aquel entonces.    Pero hagamos un repaso al momento histórico en que nos encontramos.   

En 1394, 14 años antes, fue nombrado Papa en Avignon un cardenal valenciano, Pedro de Luna, que llevó el nombre de Benedicto XIII.  Pero en ese momento había dos Pontificados, el de Roma y el de Avignon, cada uno de ellos apoyado por diferentes poderes temporales, diferentes reyes y encontrados intereses económicos y financieros.  

Castilla, la Corona de Aragón, Escocia y Francia apoyaban al Papado de Avignon.   El Sacro Imperio, los Países Bajos, Genova, Venecia, Florencia y el resto de monarquías europeas al Papado de Roma.   

El Papa Luna jugó su partida apoyando a Marti I el Humano en su pretensión de legitimar a su nieto bastardo, de esta forma la Corona de Aragón contaba como un aliado más (junto a Francia, Castilla, Navarra, Nápoles, Escocia y El Imperio Alemán) contra el poder del Papado Romano.  Pero secretamente  se avino a bloquear dicha pretensión tras la muerte del abuelo.  Detrás de este acuerdo secreto estaba la casa de Trastamara, que en alianza con la corona de Castilla, veía la posibilidad de suceder a Marti I el Humano si se eliminaba de la contienda al familiar más directo.   Así sucedió, y tras la muerte del rey de Aragon, el Papa Luna no apoyó el proceso de legitimar al nieto.  Esto habría la elección a aquellos que tuvieran vínculos familiares más lejanos.  Los pretendientes eran cuatro.  

Vicente Ferrer con el apoyo del Papa Luna y con las adecuadas presiones de la casa de Trastamara, consiguió que todas las partes aceptaran las bases de una elección.  Se elegirían tres electores por cada Reino de la Corona de Aragon: El Principado de Cataluña, el Reino de Valencia y el Reino de Aragon.   El que tuviera 6 electores a favor, teniendo al menos uno favorable en cada Reino, seria elegido.  Ese fue  el compromiso de Caspe que los cuatro pretendientes aceptaron.  

El 28 de junio de 1412 los nueve compromisarios después de deliberar votaron a favor de Fernando de Trastamara, el candidato de Castilla.  La lectura critica de la historia hace suponer a algunos historiadores que la presión económica que sufría la corona de Aragon, la inestabilidad de sus posesiones mediterráneas y la crisis del comercio fueron factores decisivos para que las clases políticas de la nobleza catalana decidieran votar al candidato de Castilla después de serles prometido el correspondiente apoyo en lo económico y comercial.








sábado, 30 de agosto de 2014

Lost: el mejor resumen que encontré...



Argumento: El vuelo 815 de Oceanic Airlines se estrella en una isla aparentemente desierta. El grupo de supervivientes va descubriendo que la isla encierra sus propios misterios, convirtiéndose en un personaje más de la serie. El naufragio se convierte en un acontecimiento que marca sus vidas y les lleva a crear entre ellos unos vínculos tan fuertes que les llevará a buscarse y reencontrarse, incluso, más allá de la muerte.


Lo mejor:


Es una obra maestra absoluta. Posiblemente, la mejor serie emitida por televisión.
La caracterización de los personajes, con su psicología y motivaciones. Son personajes muy bien perfilados.
La banda sonora.
Tiene una narrativa espectacular y diálogos muy cuidados.
Tiene buenos giros de guión con finales de temporada de infarto.
Los personajes, antes del accidente se han conocido e interactuado sin que se acuerden o sean conscientes.
La isla se convierte en un personaje más.
La filosofía de la serie: lo importante son las personas. Ellos necesitaban más a la isla de lo que la isla les necesitaba a ellos.
Aparecen temas como el sacrificio por los demás, el amor, la amistad, la lealtad, la unión, la colaboración, el esfuerzo, el tema de la muerte, la lucha del bien y del mal.
La forma en la que se trata el tema de la muerte.
Las escenas finales que cierran algunos episodios, absolutamente poéticas, donde no hace falta diálogo porque las imágenes transmiten una fuerza increíble que emociona.
Los misterios que encierra la isla y que constituyen las mayores intrigas de la serie, con escenas sobrecogedoras.
La amplia combinación de géneros que abarca: intriga, aventura, drama, comedia, ciencia-ficcción.
Es una serie con personajes en busca de redención. Los supervivientes se relacioann con la isla y entre ellos.
El final de la serie: fue metafórico, lleno de simbología. Pese a no desvelar todos los interrogantes, puso un broche de oro magnífico a la serie.
El trasfondo literario y filosófico de la serie.
El dualsimo entre el bien y el mal reflejado en los colores blanco y negro y, muy especialmente, en Jacob y el “monstruo”.
Los flash que se van intercalando y que ayudan a conocer y comprender mejor a los personajes.
Despierta deseos de aprender a hablar en coreano (se subtitulan las frases coreanas).


Lo peor:


Hubo varios capítulos de relleno donde la trama no avanzaba.
Se le puede achacar que no resolvió todos los interrogantes que había sobre la isla.


El título


Lost-Perdidos es un título perfecto para esta serie que alude a dos realidades:
Perdidos en la isla: tras el accidente, los supervivientes están perdidos en una isla a donde nadie va a venir a rescatarles.
Perdidos en sus vidas: los personajes, antes del accidente estaban perdidos en sus vidas, éstas carecían de sentido y motivaciones. Es el encuentro en la isla, el hecho de conocerse y entablar relaciones lo que hace que sus vidas vuelvan a tener sentido. La isla da sentido a sus vidas y, realmente, lo mejor que les ha ocurrido ha sido conocerse y crear esos vínculos que mantendrán hasta su muerte… y más allá. Cuando los Seis de Oceanic regresan, Jack coge el vuelo entre Sidney y Los ángeles esperando otro accidente que le devuelva a la isla.


Los flash


Flashbacks: que se centran en vivencias de los personajes antes del accidente. Vemos que algunos personajes se cruzaron con otros aunque no fueron conscientes de ello.


Flasforwards, que narran las vivencias de los “Seis de Oceanic” cuando lograron salir de la isla.


Flashsideways: que narran lo que aparentemente parece una realidad paralela donde el vuelo 815 de Oceanic no se estrelló, pero vemos que algunos personajes llevan una vida diferente a la real (Sawyer es policía, Hurley tiene mucha suerte,…). Realmente, no se trata de una realidad paralela, sino un estado espiritual donde los personajes, después de morir, se siguen buscando hasta rencontrarse y reunirse en una iglesia para cruzar juntos hacia la luz (“la otra vida”, el paraíso, seguir avanzando más allá de la muerte, el camino, la eternidad…). Se utilizan en la temporada 6.





Organigrama de las temporadas:


Temporada 1: Los supervivientes esperan ser rescatados. Comienzan a percibir los primeros misterios de la isla: la presencia de un oso polar en un clima tropical, la criatura que deambula por la selva y a la que oyen rugir por la noche (“el monstruo”), la presencia de otros habitantes de la isla “los Otros”, y la llamada de socorro de Danielle Rousseau (que lleva 16 años en la isla). Al final de la temporada encuentran una escotilla y cuatro personajes intentan marcharse en una barca: Michael, Walt, Sawyer y Jin.


Temporada 2: aparecen los supervivientes de la cola del avión. El plan de la balsa fracasa. En el interior de la escotilla (Estación Cisne), encuentran de Desmond Hume, que lleva tres años pulsando una tecla cada 108 minutos. También logran capturar a Ben Linnus, un hombre que dice haber caído desde un globo, pero que realmente es el jefe de los Otros. Al final de la temporada, los Otros capturan a Jack, Kate y Sawyer; por otro lado, logran expulsar el electromagnetismo de la estación Cisne, que queda destruida.


Temporada 3: los supervivientes contactan más con los Otros, especialmente Jack, que debe operar a Ben. Juliet abandona a los otros y se une al grupo de supervivientes. Entran en contacto con un equipo de rescate.


Temporada 4: llega un grupo de personas a bordo de un carguero, pero no son un equipo de rescate. Keamy y su grupo tratan de capturar a Ben por órdenes de Widmore. Al final de la temporada, la isla se mueve y un grupo logra salir de la isla, son los “Seis de Oceanic”.


Temporada 5: al moverse la isla, se originan saltos temporales, hasta que el tiempo se detiene en 1977, cuadno estaba la iniciativa Dharma. Los seis de Oceanic regresan al isla, pero unos saltan a 1977 mientras otros permanecen en 2007. El grupo que se integra con la iniciativa Dharma trata de cambiar el pasado para evitar que el vuelo Oceanic se estrelle.


Temporada 6: tras el regreso al tiempo presente, Jacob es asesinado y se enfrentan al Hombre de Negro. Hurley es elegidos como nuevo protector de la isla y nombra a Ben su ayudante.


Los números


Los números 4, 8, 15, 16, 23, 42 aparecen en varios capítulos y tiene gran significado en la trama.
La expedición de Rousseau llega a la isla siguiendo una llamada de socorro con estos números que recibían de un transmisor de la isla.
La llamada de socorro de Rousseau repite la secuencia de números.
Hurley gana la lotería con estos números y, a partir de ese momento, le persigue la mala suerte, hasta que llega a la isla. Hurley cree que los números están malditos.
Los números se los dijo a Hurley un tipo del psiquiátric; a su vez, a él se los dijo un hombre que oyó la sucesión repetirse desde la radio de un barco.
Los números aparecen en la escotilla de la estación Cisne.
Estos números son la combinación que debía introducir Desmond antes de pulsar la tecla. Los minutos que debía esperar (108) son la suma de los números.
Los números aparecen en la cueva asociados a los personajes principales: 4-Locke, 8-Hugo (Hurley), 15-James Ford (Sawyer),16-Sayid, 23-Jack, 42 Kwon.
Curiosidad: las coordenadas 4,815 Norte; 162,342 Oeste se encuentran en la ruta que marcaría un círculo máximo entre Sidney y Los Ángeles (que es la ruta que realizaba el Vuelo 815).
Los números aparecen por separado en multitud de ocasiones:
La llamada de socorro de Rousseau se repite durante 16 años.
El vuelo 815 está formado por dos de los números. 8-15. La puerta de embarque era la 23.
En el momento del accidente, Claire estaba de 8 meses.
Hurley estaba en la habitación 2342 del hotel. Embarca por la puerta 23
El coche que se le estropea a Hurley marca 42 kilómetros recorridos, 23ª de temperatura y 16 Km/h. Compra otro cohe por 16000$
Jack va sentado en el asiento 23b. Ana Lucía en el asiento 42.
Locke estuvo 4 años en una silla de ruedas.
4 personas viajan en la balsa.
8 personas mueren en la fábrica de zapatos de Hurley.
Hurley se entera de que le ha tocado la lotería en el canal 8.
La recompensa por Kate es de 23000$.





RESUMEN

La serie se desarrolla en diferentes planos temporales. A los sucesos que estos "náufragos del aire" van experimentando en la isla, y que les hacen enfrentarse a entidades misteriosas e inexplicables (apariciones, osos polares, un humo asesino, objetos fuera de lugar como un barco en medio de la selva, unos habitantes anteriores de la isla a los que llaman "los otros"...) se unen flash-backs que nos permiten profundizar en sus vidas y su forma de pensar, flash-forwards que nos adelantan por dónde se desenvolverán las situaciones el el futuro o flash-sideways, una técnica narrativa que se desarrolla en la sexta y última temporada de la serie y que contrapone dos planos de realidad que se complementan entre sí como si se tratara de universos alternativos.

Primera temporada: los supervivientes del vuelo se agrupan y empiezan a organizarse para sobrevivir. Descubren que una mujer llamada Danielle Rosseau había llegado a la isla 16 años antes del accidente y tratan de encontrarla. También encuentran una escotilla cerrada. Mientras unos tratan de abrirla otros deciden escapar construyendo una balsa. Mientras tanto vamos conociendo el pasado de algunos de los supervivientes y algunas señales que se dieron en sus vidas previas al accidente que parecían sobrenaturales.

Segunda temporada: mientras que deben enfrentarse a "los otros", el grupo inicial descubre nuevos supervivientes de la sección de cola del avión. Además descubren que la escotilla es un centro construido por la Iniciativa Dharma (Department of HeuristicsAnd Research on Material Applications Initiative, que podríamos traducir por Iniciativa del Departamento de Heurística e Investigación en Aplicaciones Materiales), que se dedica a realizar toda clase de experimentos y que en las instalaciones interiores viveDesmond Hume, un hombre que lleva presionando un botón tras una cuenta atrás de 108 minutos para "evitar el fin del mundo". Además encuentran otros centros de Dharma distribuidos por la isla aunque siguen sin saber cuál era su propósito. Los personajes principales Jack, Kate y Sawyer son apresados por "los otros" y la escotilla vuela por los aires.

Tercera temporada: Benjamin Linus, el líder del grupo, se revela como un inteligente manipulador. Empezamos a conocer algo más sobre "los otros", que no son salvajes, como podían parecer en las temporadas anteriores. También sabremos de la existencia de Jacob, una autoridad a la que nadie ha podido ver de gran poder. Antes de la llegada de la Iniciativa Dharma hubo un grupo en la selva conocido como "los hostiles" encabezados por Richard Alpert, un personaje que no envejece, y que terminó con los científicos de Dharma. Ben se impuso como líder del grupo. El resto de los supervivientes del vuelo, tras el accidente de la escotilla, empiezan a tener visiones precognitivas. Nuevos personajes se acercan a la isla, en principio creemos que como equipo de rescate pero solo Ben conoce sus verdaderas intenciones. En el último episodio vemos un flash-forward con Jack fuera de la isla, aunque obsesionado por volver a ella.

Cuarta temporada: llegan los asaltantes a la isla para matar a Ben, liderados por Charles Widmore, el padre de Pennny (la pareja de Desmond Hume), un personaje que apenas aparece y cuya animadversión hacia Ben se explica más adelante. Los supervivientes del vuelo quedan divididos entre los que quieren ser rescatados y los que no. Solo "los seis del Oceanic" consiguen salir de la isla: Kate, Jack, Sayid, Hurley, Sun y Aaron y lo hacen sin posibilidad de regresar porque Ben consigue "cambiar la ubicación de la isla" desapareciendo en mitad del océano. Ninguna de sus vidas, sin embargo, sigue su curso normalmente y tres años después un antiguo compañero les pedirá volver antes de morir.

Quinta temporada: nos devuelve a los que quedaron en la isla, que no solo se ha movido de posición sino que también se ha desplazado en el tiempo. Los saltos temporales nos llevan a conocer distintos momentos de la isla: las pruebas nucleares del 54, el naufragio del 88 en el que llegó Rosseau y los primeros años de la Iniciativa Dharma en los 70 que hace que los supervivientes se vean mezclados en el fuego cruzado entre los científicos y "los hostiles" de Richard Alpert. Daniel Faraday es el personaje clave, ya que es quien parece comprender y dar sentido a los fenómenos que suceden en la isla. Entre tanto, la línea temporal inicial continúa con "los seis del Oceanic" regresando a la isla a bordo del 316 de Ajira Airways.

Sexta temporada: la historia principal sigue a los supervivientes que regresan al presente. Con Jacob, el protector de la isla, desaparecido ya, los personajes deben enfrentarse al "hombre de negro", su antagonista desde el comienzo, capaz de materializarse en el humo negro, en la figura humana de John Locke o en el espectro de personajes fallecidos y de manipular a la mayoría de las personas que se le ponen por delante. Se supone que esta temporada sería el broche de oro cerrando todas las tramas abiertas hasta el momento, cosa que dividió a los fans de la serie entre sus protectores y detractores... Para algunos todo encajaba, para otros no tanto.


Curiosidades
Ojo a las cifras que son de vértigo: la primera temporada de Perdidos costó 57 millones de dólares. El capítulo piloto doble, que tardó de rodarse más de un mes, costó 14 millones de dólares, convirtiéndose en su momento en el piloto más caro de la historia de la televisión. La serie terminó tras la emisión de 121 episodios el 23 de mayo de 2010 con un episodio emitido simultáneamente en nueve países. Hay un antes y un después de esta serie, que recolocó en el mapa las ficciones televisivas y generó un boom apabullante.

Algunas decisiones iniciales alteraron totalmente lo que podríamos haber visto en una realidad alternativa al modo que propone la serie: Michael Keaton iba a encarnar a Jack y la idea era que muriese al comenzar y que Kate y Sawyer descubrieran su cadáver, ¿alucinado? Pues además, Sawyer iba a ser un viejo estafador de Búfalo pero cuando Josh Holloway hizo la audición se decidió cambiar su personaje por alguien más joven del sur. ¿La razón? A los productores les encantó que el actor se liara a patadas con una silla cuando se olvidó de una frase. Por su parte, Michael Emerson fue contratado inicialmente para dar vida a Benjamin Linus sólo por unos episodios de la segunda temporada. La fuerza de su personaje hizo que los productores decidieran que tuviera un mayor peso específico.


Hay multitud de elementos metafóricos en la serie, por poner un ejemplo, los nombres, al igual que John Locke adoptó su nombre del pensador del siglo XVII y padre del empirismo (algo similar a lo sucedido con la francesa Rosseau o el habitante de la escotilla Hume), el nombre de Penny viene de Penélope, la novia de Ulises en "La Odisea". Ulises, al igual que Desmond, se perdió en el mar y Penélope decidió esperarle. Por su parte, Jack Shepard, al que muchos consideran el personaje central de la serie ya que es el primer y el último personaje al que se ve en pantalla, es el nombre del asesino en serie de la película Frequency.

El significado de los dichosos números de la "suerte" de Hurley tiene miga lo mires por donde lo mires: los números 4 8 15 16 23 42 son el código que hay que introducir para que el cronómetro vuelva a 108 minutos. Este valor es exactamente la suma de la serie de números: 4 + 8 + 15 + 16 + 23 + 42 = 108. Además indican las coordenadas geográficas (Latitud y Longitud) que corresponde al lugar donde ellos se encuentran.


Aquí tenéis información para devanaros los sesos respecto a interpretaciones posibles de la secuencia tomando los números en su conjunto, por separado, en la ficción y en la realidad, otros se lo han tomado con más guasa y desde luego los creadores vinieron a decir que no tenían ni idea de lo que significaban, pero que eran importantes de cualquier modo por su carácter mítico: "hay algunas preguntas que son muy agradables e interesantes de hacerse, y hay otras de las que por otro lado no tenemos interés en responder. Lo llamamos el "debate midicloriano", porque en cierto sentido, explicar algo místico lo desmitifica. Que saquemos a un personaje que venga y diga: 'los números significan esto y esto otro', hace que cada aparición de los números hasta ese punto carezca de interés". ¿Cómo se os ha quedado el cuerpo?

El tatuaje del hombro de Charlie dice "Vivir es fácil con los ojos cerrados", frase de la letra de la canción "Strawberry Fields Forever" de Los Beatles.


Por qué te la recomendamos
No se han producido bolis Bic en el mundo para transcribir tooooodo lo que se ha vertido en Internet respecto a Perdidos. Es cierto que es una serie premeditadamente ambigua, sujeta a múltiples interpretaciones y que deja muchas cuestiones sin respuesta (como qué diantres era aquella estatua de cuatro dedos, entre otras muchas), pero lo cierto es que es una serie estimulante que engancha como pocas y que profundiza mucho en cada uno de sus personajes gracias a ese abanico de sus vidas que se nos permite explorar por medio de los saltos espacio-temporales.


Ni los buenos son tan buenos como parecen, ni los malos tan malos, sino todo lo contrario. Vamos, que no hay personaje que se defina como "puro" a lo largo la serie, todos tienen luces y sombras e incluso actúan de formas inesperadas en momentos clave.

Atractivos no le faltan a Perdidos: desde el toque paranormal, al de ciencia-ficción, pasando por las relaciones entre los personajes que, ya sean a nivel familiar (Michael-Walt, Sun-Jin), sentimental (Jack-Kate-Sawyer, Charlie-Claire, Desmond-Penny, Sawyer-Juliet), o antagónico (Jack-Sawyer, Jack-Ben, Jacob-Hombre de negro) dan para escribir varios culebrones. Pero lo que mejor funciona es la intriga. Por supuesto, cada episodio final de temporada está pensado para dejarte bien agarrado al anzuelo, pero es que además se abren tantos interrogantes que es imposible no tratar de completar el puzle.


¿Cuál es el significado del episodio final? Cada cual se habrá formado su propia opinión, lo que sí podemos descartar son interpretaciones que no encajen en lo que los creadores han afirmado públicamente: los supervivientes llegan de verdad a la Isla, no estaban muertos, y no se trata de la ensoñación de un único personaje.  Todo lo demás queda abierto para que cada cual especule o trate de encontrar una explicación conforme a sus propias deducciones.


jueves, 10 de julio de 2014

Els nois d’historia de Alan Bennett


Director: Josep María Pou
Teatro Goya

Esta celebrada, y aplaudida, comedia de Alan Bennett es algo más de lo que aparenta.  La puesta en escena de JM Pou es muy buena, tan buena que llega a ocultar el verdadero leit motif que la justifica.  Solo una mirada perspicaz, indagadora, descubre el núcleo central de la propuesta.  La habilidad literaria del magnifico guión, la muy bien conseguida teatralidad con gags brillantes que nos hacen reír a menudo, y sonreír la mayor parte del tiempo, van maquillando el plato que nos vamos tragando sorbo a sorbo.  Sustentada en algo tan de actualidad como la controversia entre una educación para la vida y una educación para los resultados inmediatos, nos sumerge en un mundo fascinante de citas literarias y erudición, rellenando con tal luminosidad el escenario, que oculta el verdadero drama sobre el que el autor pivota (quizá reflejo de su propia existencia), que no es otro que contextualizar la homosexualidad para, frívolamente, acabar comparando e igualando, los tocamientos genitales a sus alumnos en la moto, con los escarceos del director persiguiendo el trasero de su secretaria.  Lamentablemente se banaliza el hecho de que ese juego semiclandestino se realiza a costa de seminiños, o sea adolescentes, mientras que la secretaria es un adulto.  Pero no es solo eso, sino que nos acaba haciendo simpático al pederasta, acompañándonos mentalmente en la justificación del medio para obtener un fin.  Un quid pro quo que queda continuamente en las sombras, opaco al público, maquillado de excelencia en el brillante contexto literario.  En suma un gran ejercicio de maestría escénica en el que la aportación de un JM Pou inenarrable convierte la velada en una delicia… aunque algo indigesta para estómagos delicados.

Obviamente de la posición personal frente a la homosexualidad dependerá en gran medida la visión final de este quid pro quo.  Pero en cualquier caso yo me pregunto si trasladando el escenario, de adolescentes de ultimo curso a niños de secundaria, seriamos capaces de ver que la proposición indecente dejaría de serlo para bordear el delito. Pero la obra, como la vida, no engaña y muestra las consecuencias del juego homosexual cuando este se ceba en el más jovencito de los chicos, el todavía imberbe judío.  Como era de esperar, el epílogo de la obra describe los destinos adultos de los chicos; y el judío es el único en el que la homosexualidad se convierte en un rasgo definitivo.  Que la mayor parte del público no caiga en ello, no atine o no vea necesario profundizar en esta cuestión es parte del juego buscado.  Las cartas están bien jugadas, porque la propuesta aparente de cuestionar ‘la educación de los resultados’ es la mano derecha que nos maravilla, y distrae, mientras la otra, la izquierda, nos mete mano en la conciencia. El teatro bien hecho tiene un mucho de prestidigitación. El autor nos embelesa con sus pases mágicos mientras nos da gato por liebre dejándonos altamente satisfechos.  Una obra de teatro que recomendaré ver a mis amigos.   Advirtiéndoles, claro, que no es lo que parece.  

Vilanova i la Geltrú 29/01/2009

miércoles, 11 de junio de 2014

La Tangente



A menudo la tangente de nuestra proyección se logra usando la energía de choque generada por la imposibilidad para el parricidio enfrentada a la necesidad analítica de nuestra mente ávida de respuestas que no lleven contradicción en sí mismas.  


[ Porque... algo tiene que morir para que nazca nuevo fruto.  Es igual que usemos el ejemplo de Buda, de Milarepa, de Cristo, de Mahoma,  de Baha’ullah (el fundador de la fe Bahai) o de Gurdjieff, todos ellos murieron sabiendo lo que iba a pasar y aceptando su muerte como necesaria para con ella dar vida a un nuevo impulso. Cristo mismo, ya que es el ejemplo occidental más a mano, expuso con su propia crucifixión el ejemplo vital de la muerte necesaria.  Cristo es crucificado por sus hijos y acepta la muerte para que ellos puedan seguir viviendo.  Somos los hijos de Dios los que le matamos.  Este mensaje es todavía (¿?) más críptico que el del Nuevo Hombre (libre de la limitación Anatta: ‘no existe un yo’) y el del Reino de los Cielos (estado del yo cuando deja de ser Anicca: ‘el yo no es permanente’)  que trae consigo (de Oriente: Cachemira, Punjab ?... ) después de 30 años de vida oculta, Jesús de Nazaret, el Cristo (al que llamaron  Salvador y Mesías a su pesar, con objeto de hacer de él una bandera de lucha política en una Palestina romanizada y que necesitaba una fuerza nacionalista para sacudirse el yugo del invasor...).  Cuestión aparte es que a continuación de su muerte el legado cristiano fuera interpretado a la medida del deseo de poder de algunos, que no solo confundieron muchos de los mensajes contenidos en la vida de Cristo, sino que engendraron un poderoso mecanismo histórico, social y político que trabaja desde hace dos mil años bajo el impulso generado por su propia necesidad de dar subsistencia a quienes lo amparan y a su vez son amparados por él. ]


La tangente de nuestra proyección.  Cada ser humano lleva en sí el germen de un desarrollo bio-socio-histórico.  Aceptar o rechazar este poderoso condicionante forma parte de los llamados trabajos de Hércules.  La energía es limitada, y usarla para remover las montañas de leyes que condicionan, desde nuestras respuestas biológicas más elementales hasta las sofisticadas reglas de educación urbana que nuestro pasado familiar y social  nos ha legado, puede ser, o no, un dispendio innecesario.  Existe un sentido interno (no siempre bien desarrollado) que es el discernimiento.  El desarrollo de este sentido dota al ser (a la esencia no a la persona_lidad) de una capacidad (por tanto entrenable) que permite seleccionar los movimientos que nuestra psique emprende para emparentar (sintonizar emotivo-mentalmente) con los recursos eideícos (las ideas con potencial de desarrollo propio que Popper llama Mundo 3) que la vida pone en contacto con nuestros instrumentos de captación (la lectura, el discurso, la contemplación, la reflexión, el diálogo o la lección).  Si el discernimiento es entrenado con objetividad, y entre los condicionantes suministrados contamos con el ahorro de energía como condición necesaria  [para ello es preciso no ser ni demasiado  joven e impetuoso (cuando todavía no hay experiencia sobre la perdida de vitalidad ligada al paso del tiempo), ni demasiado soberbio (autoengañado sobre las propias posibilidades), ni demasiado engreído (incapaz de aceptar el consejo de la experiencia ajena), ni demasiado ignorante (se requiere un mínimo conocimiento del funcionamiento de las leyes que pesan y actúan sobre el sí mismo)], entonces estamos en condiciones de enfrentarnos al trabajo de aceptación o rechazo con un instrumento eficaz.  Sin él, o sin el suficiente entrenamiento de esta capacidad, corremos el peligro de iniciar movimientos o dar pasos en direcciones inseguras o pagar altos precios (en términos de desgaste de energía) por explorar determinadas posibilidades. El discernimiento permite manejar los términos de adhesión o rechazo (a ideas, actos, posturas, opiniones, etc.) con una lucidez propia de lo esencial, y sin que deba intervenir, necesariamente, un forzado análisis racional de cada cuestión.  El discernimiento es un sentido que pertenece o se encuadra entre las cualidades de la inteligencia emocional superior del ser.  Debido a ello (a que pertenece a la esfera de lo emocional) es de acción mucho más rápida que lo puramente intelectual. 



La energía de choque generada.  La búsqueda de los conocimientos teóricos y practicos necesarios para enfrentarse a sí mismo y al mundo, presupone por parte del individuo un constante ejercicio de la fricción si-no, verdad-falsedad, fe-razón, etc.  De esta fricción, frotein según Aristóteles, deviene la generación de los sentidos internos que permite la qualitas necesaria para superar la barrera del academicismo. Alimentado el ser con la energia que libera el frotein comienza su crecimiento consciente y aparece en el horizonte de sus posibilidades reales (no de las imaginaciones sobre uno mismo) la desviación de la trayectoria para la cual esta diseñado o sea la tangente de escape de su círculo de recurrencia.  Para salir de una trayectoria, lineal o circular,  hemos de aplicar una fuerza tangencial al vector que nos impulsa de lo contrario seguiremos fielmente por el mismo camino por el que discurríamos. En este caso concreto la energía se obtiene de la oposición entre las dos condiciones que siguen: 


La imposibilidad para el parricidio enfrentada a la necesidad analítica de nuestra mente. El parricidio como forma de entender la superación de la protección paterna es una necesidad evolutiva que no siempre es posible satisfacer.  El ser experimenta frustración al no ver factible (el ‘no ser capaz de’ que equivale a un ‘no ser por sí’)  la exigencia de parricidio a la que le enfrenta el análisis.  La mente analítica, la razón, experimenta frustración al no conseguir de la esencia un movimiento integral que englobe todas las decisiones que afectan al parricidio consciente.  A menudo los anclajes histórico-familiares son puntos de muelle que nos devuelven todo intento de penetración.  Complejos de culpa y malos desarrollos de la conducta sexual pueden anidar en el fondo de estos impedimentos.  Es una labor previa a todo trabajo desbrozar el camino de estas cizañas, ya  que todo el recorrido que hagamos sin haber aclarado estos poderosos condicionantes de nuestro sí mismo, pueden ser considerados inútiles, o pasos en falso sobre una estructura que llegara a trastabillar bajo nuestros pies más tarde o más temprano.  


Respuestas que no lleven contradicción en sí mismas. La vida nos emplaza diariamente para dar respuestas criticas ante eventos que pertenecen a tres órdenes de cosas diferentes.  Eventos de matiz emocional, intelectual y motriz.  El ser poco evolucionado, poco sometido a introspección, cree disponer de una conciencia unificada que actúa como centro neurálgico de sí mismo, (pero es Anatta y no lo sabe).  Abonado a esta suposición (creencia en él) persiste en creer que tomará decisiones consecuentes con el sí mismo que cree ser.   Si la introspección no es superficial, y si esta persiste en el tiempo, no tardará el ser en descubrir la contradicción en la que conviven sus tendencias.  Empezará por descubrir que su voluntad tiene varios dueños, que su decisión de ayer es discutida hoy por un nuevo deseo surgido de una nueva visión, que su emoción fue capturada por algo que su mente no admite como válido o que su gusto por un manjar choca con el conocimiento sobre la cantidad de calorías que acaba de ingerir...(despertará en él la necesidad de dejar el estado de Anicca o sea de perseguir el Reino de los Cielos).  Siendo así, aceptará la contradicción en las respuestas que su día a día le obliga a dar y verá con vértigo el vacío sobre el que transita.  Todavía ajeno a la idea de que es imposible zafarse de esta condición, tratará de encontrar validez real a las respuestas y buscará la raíz del engaño, el origen de los condicionantes que aprisionan su capacidad para dar respuestas sin contradicción.  Así se acercará lentamente al primer paso (al parricidio)  necesario para tomar en verdadera (y no imaginaria) consideración la idea de si aceptar, o rechazar, nuestro identidad bio-socio-histórica.  Aquí empezará su verdadera noche del huerto de los olivos.  



viernes, 30 de mayo de 2014

Pasando página o ¿que acabó con los 80?



Ahora hace 20 años....

 
   PASANDO  PAGINA
 [¿Qué acabó con los 80?]





1. Introito   (de las intenciones del pasar página)

Puede ser que la distancia dé la verdadera medida de las cosas. En cualquier caso si me parece seguro que al alejarse de algo uno adquiere mayor perspectiva, siempre que no deje pasar tanto tiempo que la lejanía obscurezca el pasado con el tinte del olvido.  Como en todo, el justo término es difícil de alcanzar y, dejado a su mecánico discurrir, se nos escaparía el momento (de hacerlo) como tantas cosas-ocasiones en esta puñetera vida que nos discurre (escurre?), a veces, a nuestro pesar.  Por eso, refrendando que la ocasión la pintan calva, he querido aprovechar mi último viaje a Doneztebe (Santesteban de los Labáyenes en el pasado) para explicarme mi visión de las cosas.

Vale lo precedente como preámbulo del ámbulo que sigue. Pero no estaría completa la copla si no delimito el período que me propongo revisar y el propósito del intento. En lo temporal va del 70 al 90, que en mi caso personal coincide con la franja de edad que va de los 20 a los 40 años, y el objeto del intento es el eje: CosmoVisión Ouspenskiana-René-Vida.  

Naturalmente me he de hacer 3 advertencias, comunes a cualquier lector y obvias dado el caso. La primera es la de no-pretensión de imparcialidad. La segunda la pretensión de subjetividad. La tercera es la de apreciar la preeminencia de las visiones globales por encima de los detalles de carácter historicista. 



2. Ofertorio  (de la triple perspectiva; para que el lector atienda)

2.1. Empezaré por decir en lo que creo.  Creo que el ser humano lleva en sí la posibilidad de ser/tener (siempre y en todo momento) algo más de lo que en un instante dado es/tiene.  Esta expectativa de ser/tener es fruto de su conciencia proyectiva, característica que lo identifica y hace único entre los habitantes planetarios (que sepamos por ahora).  Este simple fenómeno mental mueve la poderosa máquina imaginativa a realizar especulaciones alrededor de lo que puede ser.  La capacidad histórica del ser humano deviene consecuencia inmediata de dicha posibilidad. Sin conciencia proyectiva la historia (el recuento de lo sucedido) no tendría utilidad para el humano (a los animales no les hace falta recordar las cosas pasadas, les basta con vivir en la intensidad del momento presente).  Pero cuando uno especula debe comunicar su especulación y contrastar los resultados de ella, así aparece el lenguaje de alto nivel (el lenguaje simple sólo sirve para comunicar lo inmediato, el presente).  Al intentar comunicar comprueba que la eficacia de las especulaciones va ligada a la posibilidad de probar su grado de veracidad y con el discurrir histórico el hombre recurre a la revelación, ya sea de origen divino o humano, para reafirmar o confirmar sus hipótesis o sus especulaciones.  

2.2.  Establecido el primer marco general (recordemos que he partido diciendo que esto es aquello en lo que yo creo), me queda mover el enfoque hacia otro punto, a saber: esto es lo que yo compruebo.  Compruebo, porque puedo usar los sentidos físicos para hacerlo, que el ser humano es un grupo zoológico organizado cuyo desarrollo obedece a leyes naturales a partir de las cuales, y por necesidad biológica, el mismo deriva ciertas leyes que llamaremos sociales y que regulan su crecimiento, desarrollo y supervivencia grupal.  Esta enorme actividad humana que abarca el período que conocemos como Historia de la Humanidad (antes del período histórico actual no tenemos vestigios de lo que fue) se mueve en tres ejes principales y usa de dos herramientas básicas.  Los ejes a los que me refiero son: las religiones, las guerras y la actividad política. Los instrumentos que usan cualquiera de ellas son la fascinación de las ideas: la hipnosis mental colectiva y la aplicación de la fuerza física para violar el curso natural de los sucesos, acomodándolo a la conveniencia del más fuerte en detrimento del más débil. Estas tres actividades, y sus herramientas, son protagonizadas por seres humanos y como consecuencia de su acción sobre el devenir del colectivo social tenemos el status mundial que conocemos.  El ser humano individual es capaz de quedar sometido a la fascinacíon de las ideas o al influjo de la violencia física, pero también es capaz de las mayores hazañas en pos de la consecución de un ideal surgido previamente de su capacidad especulativa. Esta constatación es preciso mantenerla en la memoria permanentemente so pena de caer en los consabidos pesimismos apocalípticos, tan al uso en nuestros días.  Valorar si el ser humano grupal, la humanidad, en su constante adaptación y cambio, mejora o empeora en relación a la situación que poseía en el pasado, es un acto especulativo que por el momento escapa a la posibilidad de comprobación que hemos establecido como marco de referencia en este segundo enfoque.

2.3.  Pero como no hay dos sin tres, dice el refrán popular (que esconde la sabiduría del tiempo vivo que nos discurre...), quiero hacer un tercer movimiento con la cámara mental y enfocar un último marco: mi propia existencia individual (la del lector en definitiva, también, y por extensión). . ¿Que me dice mi vida?. Me explica una biografía que determina mis pasos hasta cierto punto. Me incrusta en un medio natural del que soy parte constitutiva como el mejillón de su roca o la almeja de su playa.  Me cede, a precio variable según casos, una incorporación a lo social que matizará el obrar, el sentir y el pensar sin que los determine forzosamente. Me permite graduar el grado (valga la redundancia) de incorporación a lo colectivo, el grado de personalización o individuación deseado en función de un sinfín de variables. Me admite, para acabar, un amplio abanico de posibilidades respecto a la toma de conciencia respecto a si misma (a la propia vida, existencia en si) que van desde la alienación simple total hasta los más altos estados de conciencia experimentados en el satori o en la mística.   Y al lado de todas estas posibilidades y cosas que la vida me dice hay una exigencia que la vida me pone, quizás sea la única. La vida me exige algo tan simple como es vivirla. No puedo aplazar las cosas, las decisiones, he de vivirlas instante a instante. He de ir bebiendo la copa que cada día me llena. He de digerir todas las impresiones que me trae. He de asimilar las experiencias que me obliga a pasar. Continuamente estoy frente a la exigencia de vivir el día a día, un constante recuerdo (si así se quiere aprovechar este facto ineludible) de nuestra condición animal (de aquel que sin conciencia proyectiva no vive preocupado por el devenir solo vive ocupado en el ser del presente) que aflora como penosidad dada nuestra innata capacidad (no obligadamente desarrollada por todos los seres humanos) para la proyección futura para la especulación. Esta que he llamado penosidad, lo es en tanto que encadena a la acción. Somos, soy, prisioneros de nuestras pulsiones-acciones-compulsiones que el devenir mecánico de nuestra vida nos obliga continuamente a aceptar para seguir adelante, para seguir viviendo.  Frente a esta exigencia no valen especulaciones, es así por un imperativo vital.  Sin embargo lo que no puede la especulación si lo permite la praxis.  Mis antepasados descubrieron que cuando los procesos vitales se enlentecen  (el ayuno, la inmovilidad, el dolor preagónico, la cercanía de la muerte, etc.) el dominio de la vida decae y permite una estrecha franja para escapar a la ley que exige ir deprisa, deprisa.  Es así como una herencia vital me atrae hacia el posible autoconocimiento. Parece que la vida misma sea una rueda en constante movimiento cuyos radios hacen opaca la visión de lo que hay más allá de ella misma. Las condiciones que permiten aminorar la velocidad hasta que se permita el afloramiento de lo que trasciende la rueda (la vida), son difíciles de conseguir, pues son contra natura, contra el funcionamiento ordinario de la vida misma, mas no imposibles de lograr.  Aquí empiezan los problemas. Dime que algo es difícil y allí me tendrás preparado para intentarlo. Y el intento de ser es mi vida. 



3. Consagración  (del desmadre de huevo en el que me incubé)

Puestos los marcos, como límite, y los cuadros pintados como contenido, ya empezamos a tener parte de la decoración precisa para abordar la tarea.  Seguirá la necesaria historieta de una existencia que puede ser la de cualquiera. En este caso es la mía propia. 

Procedente de una familia burguesa sin tradiciones académicas ni intelectuales, tan sólo ocupada en la supervivencia que otorga el dedicarse a "la pela" (amparándose en un honesto seguir los preceptos religiosos del momento), fui educado en un colegio de Jesuitas e inflamado por las visiones Sanignacianas desde el inicio, precoz, de mi adolescencia.  El compromiso místico, relegado a trabajar en el inconsciente dadas las tendencias naturales del momento puberal, fue adecuadamente recogido por el Opus Dei el cual en su momento transportó la Cueva de Manresa a la realidad del trabajo de cada día. Pero la reparación duró poco. El momento histórico-social y una infatigable capacidad de lectura me puso ante mundos fascinantes que abrirían la puerta del inconformismo en los ámbitos de lo estudiantil, lo social, lo religioso y lo familiar. Estamos recogiendo las formas de un mayo del 68 llegado tardíamente a nuestra Universidad.  Es la época de las comunas, del libertarismo y de la psicodelia.

                 Un terrible telón de acratismo (de desentendimiento de lo establecido) se cernirá sobre mi desarrollo en los años sucesivos: se acaban las veleidades  opusdeisticas y el inconsciente místico se refugia en el yoga, en la filosofía existencialista y en el Zen.   Un buen dia allá por el 70 aparezco por Pamplona y recibo la primera noticia de ciertas lecturas que, de la mano de Diego y Anibal, me acercan a la que a partir de ahora llamaré CVO (Cosmo Visión Ouspenskiana) para resumir el conjunto de conocimientos que emanan de Ouspensky, procedentes muchos de ellos de su contacto con Gurdjieff. Conjunto al que durante años nos hemos referido como  "La Enseñanza".





4. Eucaristía  (o sea reparto de hostias;  donde no siempre reciben los injustos)

Lo que al principio era una teoría interesante, lo más interesante que habíamos tenido entre manos el grupo de locos interesados en la CVO, se convirtió en pocos meses en una pasión para vivir parte de una vida.  Ejerció sobre nosotros la fascinación hipnótica propia de los enamorados y de los más altos ideales.  A través de la colonia mexicana de locos por el tema entramos en relación (de hecho ya existía el contacto previo de Joachi Corella) con René, y en poco tiempo fuimos uno a uno escribiendo a René, presentando nuestra candidatura al aprendizaje y acabamos constituyendo lo que llamamos un grupo de trabajo cohesionado y dirigido.  En los momentos culminantes o de mayor actividad del grupo llegamos a ser 12 personas, repartidas por la geografía de España, las que trabajábamos con René.  Son años de encuentros, de viajes, de reuniones con carácter iniciático implícito mas no verbalizado, de miles de horas invertidas en reflexiones escritas y en trabajos dirigidos sobre temáticas de la CVO.  René es insistentemente solicitado para una dedicación casi integral al grupo; paralelamente (en México DF ya se venia trabajando desde hacia tiempo en unas condiciones similares),  la diáspora a la que obliga la vida separa poco a poco a los componentes del grupo, tanto del mexicano como del nuestro, y sus integrantes empiezan a variar. René deja su trabajo de fotografía y pasa a dedicarse full time a su papel de guía-maestro.  Con una imagen de bipolaridad, de lanzadera, los mejores años de aquella época son los que transcurren en viajes de René de uno a otro lado del Atlántico, dedicando meses a permanecer en España y a residir en Labayen-Pamplona por temporadas.  Uno de los momentos culminantes (para mi experiencia) se produce el verano del 82 en Premiá de Mar  donde conseguimos reunirnos durante una semana larga la mayor parte del grupo.  En los tres años que siguen a este encuentro mi tarea será el catalogo y recopilación informática de todos los escritos de René y el grupo. En el 86 lo tengo listo y lo reparto.  Ese día, personalmente, cierro un ciclo.  Seguirán años en los que René delega su dirección apostólica ya que no puede permanecer en España tanto tiempo.  Se mantiene el nexo a través del correo y de reuniones en Pamplona-Labayen, con Diego como comentarista y director de nuestro trabajo.  Pero los años de aquellos viajes a las catedrales góticas, a Chartres, a Stonehenge, al mundo de Gaudí, al Louvre, a Grecia... ya han pasado. René acusa algunos problemas de salud y cuando vuelve a España a principios de los 90 ya es para asistir a un final de etapa manifiesto. 




5.  Reflexión final    (que no presupone objetividad alguna)


Cuando me pregunto lo que ha supuesto mi participación en el grupo de trabajo liderado por René durante 20 años, me he de responder que ha sido la aventura vital más trascendente por la que he pasado.  Nada se le puede comparar en intensidad y en huella dejada.  Este balance netamente positivo no puede ser empañado por una sensación, ni siquiera mínima, de haber perdido algo, ni que se tratara de una oportunidad de ir más lejos. ¿Por qué lo digo? Porque parece que en alguien pudiera anidar la duda de si los esfuerzos fueron suficientes, y me parece tremendamente injusto auto-cultivar (o dejar que un amigo lo haga) este pensamiento-sensacion-emoción que en realidad no es más que una variante del pobrecito de mí, que a su vez ha de estar clasificado como pulsión racionalizada procedente de las partes emocionalmente negativas; o lo que es lo mismo una variante de la compasión complaciente de sí; o lo que sigue siendo lo mismo un mecanismo de consideración interna equivocado; y que no merece otro tratamiento que el de ser desenmascarado.   

Es fácil caer en el mecanismo de pasar cuentas.  Es mucho más fácil hacerlo con los demás pero no es imposible acabar pasándolas en uno mismo apenas dándose cuenta de lo que sucede hasta que llegamos al atisbo de sacar consecuencias. En ese momento del mecanismo ya es demasiado tarde para retroceder: la conclusión ha nacido y se apodera con tremenda seguridad del yo protagonista; luego solo hará falta tener ocasión para sacarla a pasear (cualquier conversación sirve para airear a la recién nacida conclusión) y así engordará, crecerá, al alimentarse de la sutil negatividad que atrae a su alrededor (al darle nuestra atención). 

La CVO me ha enseñado, durante todos estos años, que cualquier esfuerzo hecho no se pierde.  Por grandes o por pequeños que sean seguro que nuestro relación con René ha generado esfuerzos.  Esa es la ganancia neta que nos hemos de apuntar.  René mismo nos había dicho a menudo que nada es casual en el terreno de la transmisión de conocimientos a un grupo.  Efectivamente, leyendo a Ouspensky se puede encontrar explicación a estas, hasta cierto punto, enigmáticas palabras.  Cuando una persona se acerca a ciertos conocimientos (normalmente ocultos a la visión ordinaria de los humanos) inicia una remodelación de su estar y ser en el mundo que la somete a una clase de influencias diferentes de las accidentales de la vida.  Dicho en palabras de Ouspensky: existen dos tipos de influencias sobre los hombres: las procedentes de la vida y las procedentes de un nivel externo a la vida; estas últimas nos llegan del circulo esotérico de la humanidad y difieren de las primeras en que no están, en origen, sometidas a la ley del accidente, son por tanto creadas conscientemente por alguien con un propósito determinado.  La aproximación [de cualquiera de nosotros] al camino para llegar al pleno desarrollo humano, aceptando plenamente los presupuestos de la CVO, no es fruto de una casualidad sino de la acumulación de esfuerzos.  En lo que yo personalmente difiero con otras personas es en la interpretación monovitalista frente a la multivitalista. Me explicaré (para volver después nuevamente a este punto).  Alguien puede decir:  puesto que no recuerdo nada de mis posibles recurrencias vitales (otras vidas), ni tengo flashes del tipo dejá vu, ni nada parecido, no puedo asegurar ni tener certeza alguna de que nada de lo que ahora haga me sirva en el futuro.  Y yo le contestaría:  dado que sabemos experimentalmente que el nivel de vida atrae determinado tipo de vida, es muy probable que ello también sea válido a la hora de la concepción: así nuestros hijos elijirían, como nosotros, sus futuros padres, en ese intervalo vital que transcurre entre la muerte y el comienzo del próximo ciclo.  Una vez, hablando de esto, René me dijo: si no quieres tener malos compañeros de viaje vigila que tren coges. Con ocasión de un curso sobre Ayurveda le pregunté al maestro de mi maestra de yoga si la existencia de espíritus maléficos podía afectarnos a los humanos y me contestó que en la misma medida que los leones o los tigres, y añadió sonriendo: "todo es cuestión de no frecuentar los parajes en los que abundan... ya que de la misma manera que puedes vivir cien vidas sin ver jamás un felino en su medio natural (a no ser que viajes a la sabana africana) así también sucede con ciertas formas vitales no corpóreas; ...que no tengamos contacto es meramente un problema de espacio". Lo que valido a través de mi experiencia, la cual me ha enseñado que cuando quiero oír trinar a los pájaros voy a la montaña y no al metro (suburbano, subway).   En conclusión he de admitir que a pesar de que no pueda comprobar (y entender) los mecanismos por los que se transmite de ciclo a ciclo la experiencia y el trabajo interno, si he de aceptar (por la experiencia analógica) que existen formas efectivas de transmisión de esta hacia el futuro; es más he oído explicar a René, no una sino varias veces, que el trabajo en el hoy afecta al ayer, por tanto las influencias no sólo se transmiten hacia adelante, hacia lo por suceder (que fuera del tiempo ya es) sino hacia lo sucedido (lo cual es plenamente explicado por la circularidad del tiempo, ver: El tiempo vivo, Un nuevo modelo..., etc). 

Bien, retomaré la última frase antes de la disgresión sobre univitalismo/multivitalismo. Decía: "La aproximación de cualquiera de nosotros al camino para llegar al pleno desarrollo humano, aceptando plenamente los presupuestos de la CVO, no es fruto de una casualidad sino de la acumulación de esfuerzos."  Es fundamental darse cuenta, caer en la cuenta, comprender más allá de la apariencia, que identificar el contacto con René como el camino, a parte de ser un acto de la imaginación (un acto interesado), es la fuente o raíz de la cual brota o se alimenta un aspecto de la falsa personalidad (la personalidad de aprendiz esotérico) y que a la hora de cerrar etapas puede traer pensamientos-emociones-movimientos de culpabilidad (por la falta de resultados, por la falta de esfuerzos, por la pérdida de oportunidades, etc) ya descritos en el inicio de la reflexión.  Insistiré mil veces en ello por que es la piedra de toque, la piedra sillar que debía de encontrarse entre los cascotes para que la reconstrucción de nuestra propia catedral no partiera de bases equivocadas.  Lo dice explícitamente (supongo que previendo las dificultades que ocasionaría el tema) Ouspensky en Fragmentos... capitulo 10 y especialmente páginas 406-407.  Efectivamente nuestra calenturienta y apresurada imaginación nos lleva a pensar (en la década de nuestros veintipico años) que el camino empieza al mes siguiente de leer Psicología de la posible evolución, ya está, ya hemos encontrado la escuela que nos pintaban tan difícil los libros; será que nos lo merecíamos; será que somos hombres ladinos; será que hemos nacido con la flor en el culo; será..., será, será el cuento de la lechera.  "Este es un trabajo que abarca todo tiempo" decía René,  y no se dejaba ningún artículo en la construcción de la frase.  El camino no comienza en el mismo nivel que la vida, sino en un nivel muy superior.  Nuestra imaginación nos ha mantenido en la fascinación de otra cosa y René ha sido parte de nuestra identificación.  Pero probablemente es lo que necesitábamos en el nivel en que nos hallamos.  Pedir y se os dará.  Esa era nuestra necesidad en este momento.  Como cualquier experiencia, esta representa una acumulación de material interno a la cual se puede volver siempre que se quiera para aprender.   Hemos estado, y porqué no, seguimos estando, sometidos a un preciso entrenamiento para aprender a diferenciar las influencias que nos llegan. Ahora, después de todos estos años estamos mucho mas preparados para el discernimiento, capacidad de nuestros sentidos internos que permite olfatear rápidamente cuando los eventos forman parte de la vida accidental o cuando son cosas que tienen su origen en la segunda clase de influencias (aunque puedan haber caído bajo el influjo de la ley del accidente).  

Ni puedo ni me atrevería a juzgar la figura de René. Solo él sabe cual es su papel en esta partitura, nosotros sabemos cual es la parte que a nosotros toca y aun así sólo de forma velada o deformada por nuestras respectivas subjetividades.  Pero sí tenemos los elementos suficientes para poder afirmar que hemos pasado, todos nosotros, por una forma preparatoria de contacto para aumentar nuestro nivel de ser.  Una preparación necesaria para acercarnos al camino, no para andar por él (por que entre otras cosas ni lo hemos vislumbrado); una forma de subir niveles previos que es imprescindible para que como humanos lleguemos un día (ahora o en otro ciclo) a estar preparados para trabajar bajo una dirección consciente y con un objetivo preciso, sea en el cuarto camino o en cualquier otro.  

Se nos ha dado un gran instrumento para seguir pescando.  La CVO, que estos veinte años nos ha cedido el contacto con René y el trabajo de grupo, nos dota de un magnífico instrumento de afinación de nuestro desequilibrado e inarmónico ser. El campo de trabajo donde poner a prueba este crecimiento de la esencia son precisamente las accidentales condiciones que la vida a cada uno le haya deparado.  Nuestra energía, tanto si hemos aprendido el truco de no malgastarla como si no, ha de emplearse en los ámbitos naturales de nuestro desarrollo como personas sociales.  No podemos (no hemos podido y por eso ahora estoy escribiendo esto) desdoblarnos como Hide y Jekill; una parte de nosotros identificada con la imagen de aspirante a derviche volador, otra tratando de resolver los problemas de cada día con la pareja, con el trabajo, con la sociedad, etc.  La energía ha de canalizarse hacia una vida unificada que tenga objeto por sí misma, y en el ejercicio de ella encontrar la ocasión de equilibrar la actividad interna.  Esta bien el período de ilustración intensa al que fuimos sometidos. Equivale a un pase por la primaria, pero no vayamos a confundirlo con el ingreso a la Facultad.  Hemos de comprender, para no ser tremendamente injustos con René, que si él hubiera sido ese Maestro supuesto y nosotros ese Grupo Esotérico por él seleccionado, le estaríamos colgando el enorme peso de un fracaso en toda regla.  Me niego a pensar en una selección consciente de cada uno de nosotros para la formación de un grupo equilibrado y armónico, me niego a atribuir intencionalidad consciente a nuestra selección, me niego en fin a atribuir a René la responsabilidad consciente que todo Maestro tiene sobre el futuro de aquellos a los que él busca para formar su Grupo de trabajo, el cual siempre es constituido en el marco de un trabajo concreto a hacer, en un momento histórico concreto y con unos límites temporales claros.   La única fuerza consciente que todos estos años, y no olvidemos que René lo había dicho muchas veces, ha actuado sobre nosotros son las propias ideas de la CVO.  Como explican, tanto Gurdjieff como Ouspensky, las ideas se proyectan desde un centro consciente y a pesar de caer en el torrente de la vida ordinaria siguen trabajando a aquellos que quedan bajo su influjo, da igual que haya sido aprovechando la máscara de la fascinación de una escuela esotérica como si ha sido por que encontraste un gurú personal.  La validez del medio no está siendo juzgada, lo que cuenta es la transformación interna que supone el haberse acercado a las ideas potentísimas que la CVO ha sabido adecuar a nuestros días. 



6.  Mi visión personal de la cosa.


Formamos parte del Tritocosmos.  En la dimensión en la que le es posible vivir, a esta forma vital que llamamos ser humano, y durante el tiempo que la ley del accidente nos lo permita, hemos de reciclar, destilar, refinar, separar el principio espiritual que nos anima, del soporte fisico que nos transporta. Cada ciclo nacimiento-muerte se produce en el mismo espacio tiempo, el cual es tan sólo una más de las infinitas posibilidades de una sola existencia. Sólo puede detenerse la espiral de la recurrencia por un trabajo humano que nos permita trascender con la conciencia el momento de separación del ser espiritual del ser animal.  Para ello es preciso que se dé el fenómeno de organización mental que da lugar a la generación anímica (a la aparición de un alma). Fraguar este proceso es el trabajo del esoterismo.  

Nuestra posición dentro del Tritocosmos es la pertenencia a un ser galáctico, dentro del cual habitamos un sistema planetario que depende de un Sol. Sabemos que somos parte de la naturaleza que a su vez es la forma biológica que cubre al ser Terrestre.  La razón de ser de la cubierta biológica de la Tierra es de tipo energético.  La naturaleza tiene la capacidad transformadora de la energía recibida del nivel del Sol que la Tierra debe de transformar para a su vez irradiar hacia su nivel inmediatamente inferior: La Luna.  La cubierta biológica, en conjunto, tiene una función metabólico-digestiva y dentro de la naturaleza el papel del hombre es transformar ciertas energías que recibe, entre ellas la procedente de los alimentos, en otras más sutiles que serán irradiadas hacia el nivel inferior.  Es por tanto una función excretora la suya.

La limitación sensorial así como la disposición de las leyes cósmicas incapacitan al ser humano corriente para la percepción de la realidad tal como es en el mundo cuatridimensional en el que vivimos.  Por ese motivo la Tierra y la Luna sólo tienen sentido o apariencia, para nosotros, como masas minerales gravitando alrededor de una estrella que es el Sol. 

La evolución natural (o sea prevista por el movimiento creador inicial) de la Tierra tiende a necesitar una evolución de la naturaleza y dentro de esta la [evolución] de la humanidad adaptándose a sus crecientes necesidades (las de la Tierra). La cadena trofotrófica (el nivel de la Luna se alimenta del nivel de la Tierra y esta se alimenta del nivel del Sol, etc, etc, lo que se resume por: trofotrófico=alimento de alimentos) precisa de cantidades crecientes de cierto tipo de energía que en el nivel que nos compete se produce a través de las emociones humanas. Las leyes cósmicas que nos rigen (como las biológicas que conocemos) permiten un mecanismo contracorriente (tal como la bomba de sodio de la membrana celular) que a costa de un gran gasto de energía personal impida la evolución natural de ese elemento individual de entre las miríadas de elementos personales que fieles a las leyes que los rigen correrán la suerte de ser consumidores y productores de alimento en la cadena trofotrófica.  ¿Por qué existe esta excepción? ¿Hasta qué punto es necesaria [la excepción] en la cadena?  No lo sabemos ni tenemos en el nivel de ser actual explicación para ello.  Sólo sabemos que es así y que por los motivos que sea existe la posibilidad de ir contra lo programado.  Es evidente que la dificultad que entraña el completar el proceso, hace que sea ínfima la posibilidad de que el resto de las miríadas personales escapen a su función prevista, lo cual resta importancia al proceso desde el punto de vista de la economía cósmica.  

Una compleja teoría dimensional, magníficamente expuesta en la CVO, explica la compatibilidad de la vida simultánea en universos concéntricos que no se molestan entre sí.  Es posible saltar de dimensión mediante el mecanismo contracorriente. En lenguaje figurado esta posibilidad es la de alcanzar la vida eterna, el cielo, el nirvana o el paraíso de los fieles. 

Desde el principio de los tiempos las religiones son los vestigios de un conocimiento oculto que permite tener éxito en el esfuerzo por apuntarse al mecanismo contracorriente.  Es preciso vueltas y vueltas al espiral del alambique para destilar de la naturaleza humana las condiciones de nacimiento que faciliten el acceso al camino (entendiendo por este el camino que lleva a la liberación de la recurrencia).  

Las religiones, los nobles ideales diseminados en la corriente de la vida, la acción de las ONG para paliar las desdichas de la desigualdad humana irreparable, el intento no fraudulento de llevar adelante ideales políticos basados en la solidaridad interhumana, etc, etc, son otras tantas siembras del círculo consciente, son influencias llegadas a la vida procedentes de un núcleo [de seres] que necesita alimentarse de las consecuencias que su implantación  (la de estos ideales) crea entre los humanos.  La ley cósmica es inexorable: para ascender un paso en la escala contracorriente has de dejar a alguien en tu lugar  (no importa tanto el nivel de verdad absoluta de lo que cree estar haciendo como el esfuerzo [=alimento para otro nivel] que ha hecho y que de otra forma quizás se hubiera perdido).  

Al final nos damos cuenta de que somos poca cosa más que alimento para peces. Amén. 




P.D. No quiero acabar sin antes expresar mi satisfacción al saber que René vuelve a tener (quizás no lo ha dejado de tener nunca) un grupo de estudiantes en el DF.  Estoy convencido que sus integrantes nunca sabrán hasta que punto la experiencia de René con nosotros los está ayudando en este momento. Tampoco sé, ni podemos saber, si su trabajo nos puede ayudar en el futuro o quizás en el pasado.  Y, si algún día, de regreso en la vida, se descubrieran a si mismos desfascinados, verían que son las mismas ovejas pendejas de siempre pero con unos años más y sobre todo con más lana. 






© MacAlbert
Granollers sur Mer,  mayo 1994