miércoles, 23 de abril de 2025

La cometa china


 La cometa china


Y el tiempo no se detiene, o si, no lo podemos entender todavía. A veces lo parece. Como esa cometa que los niños chinos levantan en Sanmenxia, en el parque de Swan Lake, y que por momentos parece que se detiene en el aire.  Mis pensamientos vuelan como nubes arrastradas por el viento.  Dejo que fluyan y que atraigan recuerdos.  


El viento arrastra las hojas caídas por la hierba y el sonido que hacen es como  el suave rasgueo de unos dedos sobre un arpa. En esas nubes anida un sentimiento que  me atrae hasta Kilkeny, en Irlanda, donde por primera vez pensé que no era el aire el que aguantaba el vuelo de las cometas… Ahora, al fijar mi atención en los niños chinos correteando, siento de nuevo que no soy más que un sentido, todavia sin forma, que pelea por sentirse de carne y hueso.


Siento las lágrimas que no han caído y no sé como explicarme la nostalgia de mi propia infancia. Estoy a punto de llorar pero veo a los padres de esos niños chinos en los bancos y siento de pronto como si sus manos chinas hurgaran en mis recuerdos, y en mis fracasos. 


I feel the tears that haven't fallen and I don't know how to explain the nostalgia of my own childhood. I'm about to cry but I see the parents of those Chinese children on the benches and I suddenly feel as if their Chinese hands rummage through my memories, and in my failures.  


Ireland is far away... nostalgia for an unshared time, which perhaps would have been happy.  I met her later.  And I failed her.  Then there was no turning back and the wind dragged us, like unguided kites, to separate destinations.


Vuelvo al presente a duras penas. 


El sollozo gime con la nueva racha de viento al ver a unos padres paseando con sus hijos por el parque, entonces recuerdo el pelo castaño y rubio de mis hijas, ondeando al aire del columpio del parc dels Pinetons. La añoranza de esos días, que pasaron volando como la cometa, me duele sin remedio y de nuevo mis ojos se inundan de lágrimas.


The sob moans with the new gust of wind when he sees some parents walking with their children through the park, then I remember the brown and blond hair of my daughters, waving in the air of the parc dels Pinetons swing. The longing for those days, which flew by like a kite, hurts me hopelessly and again my eyes are flooded with tears. 


Y noto, nuevamente, como el tiempo me atraviesa. 

Como si mi cuerpo fuera el aire sobre el que se aguanta mi cometa. 


And I notice, again, how time goes through me.

As if my body were the air on which my kite stands.

Like in Ireland.


Sanmenxia 20 abril 2025

三门峡2025420