Un día me llegó un escrito por internet... el tópico merecía hacer un comentario, así que escribí lo que sigue.
Un conocido escritor colombiano dijo: “Las mujeres de mi generación son las mejores. Y punto. Hoy tienen cuarenta y pico, incluso cincuenta y pico, y son bellas, muy bellas, pero también serenas, comprensivas, sensatas, y sobre todo, endiabladamente seductoras, esto a pesar de sus incipientes patas de gallo o de esa afectuosa celulitis que capitanea sus muslos, pero que las hace tan humanas, tan reales. Hermosamente reales.”
Pero a mi me parece que las mujeres, todas, son hermosas, seductoras y reales cuando las miramos con los ojos del deseo. Y humanas cuando las miramos con los ojos del alma. No importa su edad. Cada edad tiene lo suyo. A los 20, algunas mujeres no son serenas pero son apasionadas. A los treinta, quizás muchas no sean comprensivas pero tienen una belleza al limite de su máximo esplendor. A los 40, quizás han iniciado su otoño pero pueden ser sensatas, seguras y seductoras. Algunas saben siempre, a cualquier edad, lo que quieren. A los 40 lo saben, pero ya lo sabían con veintipico… Algunas no serán nunca apasionadas ni sensatas ni serenas. Quizás pueden ser torpemente seductoras y encontrar la horma de su zapato, pero estas seguramente no leerán lo que algunos hombres pensamos de las mujeres, tengan la edad que tengan.
Yo creo que las mujeres de 40 y pico son como todas las mujeres. Cuando valen la pena son maravillosas. Como los hombres. No hay nada nuevo bajo el sol aunque a veces la melancolia de aquello que no volverá nos haga pensar que al alejarnos de la juventud las cosas, por otro lado, mejoran en algun sentido. Con la edad hemos aprendido, los unos y los otros, a buscar esas compensaciones que cazamos al vuelo en las palabras afortunadas de otros. No me gusta generalizar para quedar bien con todas ellas, con las mujeres. Muchas no lo merecen como tampoco lo merecen muchos hombres que han pasado por la vida sin enterarse.
Algunas de las mujeres después de los cuarenta y pico todavía son capaces de apasionarse y de revivir su propia vida. Quizás de reescribir un final que de otra forma sería solitario y conformista. Algunos hombres también. Pero no es fácil encontrar coincidencias en un mundo lleno de casados y casadas. No se trata de irle robando maridos a las amigas… pero tampoco es fácil el encuentro entre tanto divorciado equívoco o de divorciadas colgadas de una vida que no pueden cambiar. Sin embargo las mujeres de 40 y pico, como los hombres, cada vez tienen menos oportunidades para intentarlo, si, para intentarlo de nuevo otra vez más… La próxima vez siempre puede ser el fracaso definitivo. Nuestros cartuchos tienen cada vez menos alcance, en proporción a nuestra lenta, pero segura, decadencia física. Pero todos, ellas y ellos, saben íntimamente que el tiempo no perdona. Algunas de las mujeres de 40 y pico esconden la cabeza bajo el ala y no quieren pensar en el paso del tiempo. Algunas piensan que no pensándolo el tiempo pasara más despacio…
Y sigue diciendo el escritor…
“Nacidas bajo la era de Acuario, con el influjo de la música de Los Beatles, de Bob Dylan.... Herederas de la "revolución sexual" de la década de los 60 y de las corrientes feministas que, sin embargo recibieron pasadas por varios filtros, ellas supieron combinar libertad con coquetería, emancipación con pasión, reivindicación con seducción. Jamás vieron en el hombre a un enemigo a pesar que le cantaron unas cuantas verdades, pues comprendieron que emanciparse era algo más que poner al hombre a trapear el baño o a cambiar el rollo de papel higiénico cuando éste, trágicamente, se acaba, y decidieron pactar para vivir en pareja.”
Yo le replicaría al escritor que, después de pensarlo, creo que lo que hace diferente a las mujeres de 40 y tantos que pertenecen a nuestra generación no es que hayan nacido en una época concreta, no, pues todas las épocas son concretas y, dentro de 20 años, las que hagan 40 y tantos entonces, habrán nacido bajo otro signo que también será significativo… todo eso esta muy bien para halagar a los que nacieron en “nuestra” época, la era de Acuario, los Beatles y Bob Dylan… Lo que las hace diferentes, a algunas, es que llevan 40 años de experiencia en sus costillas. Y la experiencia acumulada les da ciertas características propias que no pueden tener a los 30 ni a los 20…
Pero en su generalización va más allá todavía nuestro escritor y dice asi:
“Aquí hay algunas razones de por qué una mujer de más de 40 nunca te va a despertar en la mitad de la noche para preguntarte.... "Qué estás pensando?"- No le interesa lo que estás pensando. Si una mujer de más de 40 no quiere mirar un partido de football, ella no da vueltas alrededor tuyo. Se pone a hacer algo que ella quiere hacer y generalmente es algo mucho más interesante. Una mujer de más de 40, se conoce lo suficiente como para estar segura de sí misma, de lo que quiere, y de con quién lo quiere. Son muy pocas las mujeres de más de 40 a las que les importa lo que tú pienses de lo que ella hace.
Una mujer de más de 40, tiene cubierta su cuota de relaciones "importantes" y "compromisos". Lo último que quiere en su vida es otro amante posesivo. Es muy raro que entren en una competencia de gritos en medio de la ópera o de un restaurante caro. Las mujeres de más de 40 son generalmente generosas en alabanzas. Ellas saben lo que es no ser apreciadas lo suficiente.”
Parece como que el escritor ha tenido encuentros con cierta clase de mujer y que lo ha generalizado para todas de más de 40. Me temo que estoy de acuerdo en algo de lo que dice, pero no en aplicarlo a todas. Creo que la mujer que describe también podría treinta años. La mujer que “se conoce lo suficiente para, por ello, estar más segura de sí misma”, como mucho vive en un engaño de si misma. Seguramente tiene los pies de barro y su seguridad puede quedar rota con gran dolor el dia que es forzada a ser sincera consigo misma. Pero lo que la diferencia con la de treinta que esta igualmente segura, es que a los treinta una mujer se puede permitir, mas fácilmente, ser sincera que a los cuarenta y tantos. A estas alturas de la película muchas mujeres han doblado el cabo de hornos y no pueden rehacer su vida. No se pueden permitir descubrir que su seguridad esconde su incertidumbre frente al amor o la incapacidad para vivir apasionadamente la vida por que son víctimas de las circunstancias que las determinan. Algunas a los cuarenta descubren que lo que hacen para ganarse la vida no las llena; otras que, la familia o unos padres a quien cuidar, las tiene atrapadas; otras no encuentran sentido a sus vidas más allá de los hijos y serán las víctimas del “nido vacío” con el paso de los años; otras se defienden de la decadencia con la superficialidad de la vida cotidiana; otras apuestan por el devaneo o la seducción sin fundamento; otras, la mayoría, no se plantean nada y nunca leerán nada del escritor colombiano ni mío.
Me parece una barbaridad pensar que las mujeres de 40 y tantos por el mismo hecho de su edad tengan “cubierta su cuota de relaciones importantes y compromisos”. Que tristeza si eso fuera cierto. Afortunadamente eso se puede aplicar a algunas de las mujeres que habrá conocido el escritor. Pero es una temeridad hacernos pensar que todas son asi. Algunas mujeres tienen capacidad para el compromiso y otras no. Pero no depende de la edad. Pensar así es echar una losa sobre la esperanza de todas las mujeres de más de 40 años… Aunque comprendo que algunas mujeres al leerlo se justifiquen a si mismas en su cobardía o en su pereza… Acabo diciendo que, ciertamente, si una mujer, tenga la edad que tenga, no te pregunta nunca que estas pensando, es que no le interesas. Y si es asi, amigo, como tú estés interesado en ella, pasarás un mal rato.
También añade cosas ciertas como por ejemplo lo que sigue:
“Son honestas y directas. Te dicen directamente que eres un imbécil si es lo que sienten sobre tí. Tenemos muchas cosas buenas que decir de las mujeres de más de 40 y por múltiples razones. Lamentablemente no es recíproco. Por cada impactante mujer de más de 40, inteligente, bien vestida ,sexy, hay un hombre con casi o más de 50.... pelado, gordo, barrigón y con pantalones arrugados haciéndose el gracioso con una chica de 20 años.”
Aunque después de leerlo dos veces me parece un halago excesivo. También hay mujeres de 40 y tantos dejadas, algunas que no son sinceras y otras que no son directas ni atrevidas. Y no todos los hombres son como él los pinta.